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miércoles, 11 de febrero de 2015

BEBÉ DE ALTO DECIBELIO


Se habla mucho de bebés de alta demanda. Pensamos que Rosquis no lo es, pero sí que es cierto que demanda cariño, compañía, consuelo, estar limpio, comer, estar distraído, salir a pasear, supongo que como todos los bebés y peques. Lo que sí que tenemos claro es que es un bebé de alto decibelio. Ya de recién nacido cuando lloraba tenía bastante potencia de voz y, con 3-4 meses, notamos un día que el llanto había cambiado de intensidad y que presentaba una potencia mucho más alta.

Las legislaciones europeas admiten de máximo ruido en horario diurno 65 decibelios y 55 Db en horario nocturno. El llanto de un bebé en pleno apogeo acústico puede llegar a 110 Db. Lo cierto es que el de Rosquis puede oírse desde la entrada del portal y vivimos en un cuarto piso. Empecé a darme cuenta cuando el vecino del primero le dijo: "Ya te oigo cantar", y solo tenía unos pocos meses.

También la pediatra tiene que sufrir sus martillazos sonoros cada vez que vamos a la visita y le tiene que explorar, ya desde que sube a la balanza no deja de gritar ni llorar. Cuando grita de contento también lo hace con mucha potencia, es un bebé con do de pecho.

A veces, cuando le estamos cambiando y no se deja y comienza a gritar con todas sus fuerzas nos puede llegar a doler los oídos de tan fuertes picos de llanto. Y no es broma.

A veces pensamos que la culpa de que sea tan chillón y llorón es de Papá y Mamá Rosquillas que siempre hemos hablado en tono de voz alto y estamos acostumbrados a gritarnos uno en una punta y el otro en el extremo opuesto de piso para pedirnos cosas desde la lejanía.

Cuando está a buenas hemos intentado que, cuando balbucea o grita de contento, lo haga en un tono más bajo. Pero cuanto más le avisamos que baje la voz, más se envalentona y la alza. El otro día que fuimos a una sesión de cine para bebés nos dimos cuenta que, de toda la sala, y eso que había bastantes bebés, -y muchos de ellos de 13 a 16 meses-, Rosquis era el que más gritaba.

Por eso mismo, a veces, sufrimos de tener que llevarlo a lugares públicos porque cuando se desencadena su repertorio sonoro, todas las miradas se giran hacia nosotros. Me estoy empezando a acostumbrar, pero las otras personas del local, ¿se pondrán en nuestro lugar? ¿no tienen derecho a un rato de tranquilidad mientras están fuera de casa o incluso nuestros vecinos, ¿no tienen derecho al silencio?

¿Os pasa a vosotros? ¿Vuestros peques son de alto decibelio? ¿Qué opináis?

6 comentarios:

  1. Vikingo tuvo una etapa que fue tomando conciencia de su voz y gritaba a todas horas, era insufrible porque encima se partía de risa al oírse. Del tema llantos no nos podemos quejar, tiene potencia pero no suele llorar mucho rato. Un abrazo

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    1. Al menos teníais sonrisas y lágrimas, jajaja, os comprendo, es una etapa muy complicada. Bastante difícil es el día a día para encima oir llantos tan potentes. besitos y feliz Carnaval!

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  2. La verdad es que en publico es un rollo. Sabes que molestas pero no puedes hacer nada. Mi peque la verdad no llora casi y, cuando lo hace, es flojito. Pero si estamos en la calle me da cosa. Pero pienso en lo que dice mi madre: todos (o casi) hemos tenido hijos. Y yo añado, o los tendrán. Jejeje.

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    1. Que suerte no tener un hijo llorón, yo desgraciadamente, no sé que es eso. Y sí, en público pasamos un poquito de vergüenza y mucha gente no se hace cargo. besitos y buen Carnaval!!!

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  3. Bueno, yo ya te lo he dicho en twitter, mi peque también es de gritar. Es de esas que no para cuando se pone a llorar. Ella llora con ganas, llora y llora y entonces, si ve que nada pasa, se pone a gritar. Casi siempre esto le pasa con la pediatra, sin ir más lejos, hoy que hemos ido de urgencias y no se dejaba tocar por ella, yo allí, hablándole, dándole la mano y besitos, pero no había manera. Al final de tanto chillar vomita. En casa, casi nunca ha gritado de esa manera. Mas bien lo hace fuera. Para que todos lo vean en su máximo esplendor.

    Saludos

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    1. Espero que tu hija se encuentre bien y que se mejore, que no fuese nada importante. Y sí, parece que en público, a veces, se envalentonen más, quizás porque están en terreno hostil, no sé...besitos y buen Carnaval!!!

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