Desde Papas Blogueros esta semana nos proponen que escribamos una carta a nuestro yo del futuro y como me ha parecido un ejercicio muy interesante, pues me sumo a #ETDLS6. ¡Vamos allá!
Querido diario,
Esta mañana me he vuelto a mirar al espejo del baño y ya he visto a una mujer entrada en años y peinada en canas, a la que no le gusta mucho ir de peluquería ni teñirse el pelo y me he girado y allí estaba detrás mío frente al espejo de la habitación Rosquis, ensayando una nueva melodía con la guitarra. Rosquis está estudiando música, dice que de mayor quiere ser cantante. En el cole no le va nada mal. Él es de aquellos chicos listos que no necesitan mucho tiempo para memorizar una lección o hacer los deberes (¡si, aún les ponen deberes, no hay manera que esto mejore!), pero necesita tener más constancia y que le vayan un poco detrás para que no lo deje todo para última hora. Además, tiene una predilección por la moda y las tendencias que me dejan bastante sorprendida, sabe combinar estilos a la perfección y todo le sienta bien. Se ha convertido en un chico atractivo, pero muy atento y cariñoso, aunque sigue teniedo su "genio" y siendo tan "cabezota" como lo era ya de bien pequeño. Es un "culo inquieto". Me gusta compartir estos momentos con él y escucharle como toca y como compone.A veces, Papá Rosquillas también se une a tocar con él y son instantes muy intensos y especiales.
Me he vuelto más paciente y más moderada con el tiempo, aprendí a templar un poco los nervios, aunque hoy estoy más nerviosa de lo habitual, va a ser un día especial. Tras la primera actuación de Rosquis con su banda en la Sala Apolo, vamos a dormir pocas horas. Mañana cogemos un vuelo a Los Ángeles y nos vamos a cubrir los Oscars de Hollywood con Faces por primera vez. Rosquis y Papá Rosquillas me acompañan, estamos de lo más emocionados. ¡Sueños que se cumplen! Y lo más importante es que seguimos compartiéndolos juntos en familia, tanto estos buenos, como los malos momentos, y que hemos aprendido que la vida es una progresión constante, que de todo se aprende y que la paciencia y la constancia acaban dando sus frutos.
Bueno...Voy a dejar de escribir sentada en la tapa del bidet y vamos allá....¡Nos aguarda un día largo y muchos retos por delante!
martes, 31 de mayo de 2016
lunes, 30 de mayo de 2016
#COOKINGEASYFORBEGINNERS: TARTA DE QUESO CON FRUTAS DEL BOSQUE
No soy una buena cocinera, sino una cocinera "principiante y de supervivencia". Admito que no sé hacer ni repostería, ni croquetas ni canelones, ni comidas muy elaboradas. Por ello, cuando me invitaron a comer a casa de unos amigos, me pregunté qué postre podía llevar que reuniera varias características: De sencilla y rápida elaboración, que puediera ser apto para comer tanto adultos como niños, pues no lleva ninguna clase de licor, y que fuese delicioso al paladar. La respuesta está aquí: En la tarta de queso con frutas del bosque de mi #CookingEasyForBeginners, en este caso para 10 personas.
Ingredientes:
-Bizcochos de soletilla (unas 24 unidades).
-1 bote de nata líquida.
-2 tarrinas de queso Philadelphia, disculpad la marca, pero es mi preferida en queso fresco para untar (1 tarrina de tamaño grande y la otra, de tamaño pequeña) .
-1 limón.
-2 tarros de mermelada de frutas del bosque.
Duración: 20 minutos o media hora, pues no necesita horno.
Preparación:
-En la fuente donde vayamos a servir el pastel ponemos una capa de bizcochos haciendo "la cama", como base.
-Se mezcla en un bol aparte, el queso fresco para untar, la nata líquida, se exprime el limón y se mezcla hasta que la masa queda homogénea para aplicar sobre los bizcochos.
-Se van pintando y cubriendo los bizcochos con la cuchara hasta quedar blanco completamente y a, continuación, se pone una segunda capa de bizcochos.
-Volvemos a repetir procedimiento de pintar la nueva capa de biszcochos con la masa.
-Se adorna con mermelada de frutas del bosque, de manera homogénea, hasta que toda la superficie de la tarta quede cubierta.
-La tarta se cubre con papel transparente, se conserva en frío la nevera 24 horas antes de servir, reposando la masa, para que esté más rica y esponjosa.
¿A qué es sencillita y fácil? ¡Ahora solo queda hincarle el diente y a triunfar con el postre!
¿Cómo hacéis vuestra tarta de queso? ¡Se admiten sugerencias!
Ingredientes:
-Bizcochos de soletilla (unas 24 unidades).
-1 bote de nata líquida.
-2 tarrinas de queso Philadelphia, disculpad la marca, pero es mi preferida en queso fresco para untar (1 tarrina de tamaño grande y la otra, de tamaño pequeña) .
-1 limón.
-2 tarros de mermelada de frutas del bosque.
Duración: 20 minutos o media hora, pues no necesita horno.
Preparación:
-En la fuente donde vayamos a servir el pastel ponemos una capa de bizcochos haciendo "la cama", como base.
-Se van pintando y cubriendo los bizcochos con la cuchara hasta quedar blanco completamente y a, continuación, se pone una segunda capa de bizcochos.
-Volvemos a repetir procedimiento de pintar la nueva capa de biszcochos con la masa.
-Se adorna con mermelada de frutas del bosque, de manera homogénea, hasta que toda la superficie de la tarta quede cubierta.
-La tarta se cubre con papel transparente, se conserva en frío la nevera 24 horas antes de servir, reposando la masa, para que esté más rica y esponjosa.
¿A qué es sencillita y fácil? ¡Ahora solo queda hincarle el diente y a triunfar con el postre!
¿Cómo hacéis vuestra tarta de queso? ¡Se admiten sugerencias!
jueves, 26 de mayo de 2016
UNA REFLEXIÓN SOBRE LA PATERNIDAD CORRESPONSABLE: EL CASO DE PAPÁ ROSQUILLAS
A raíz de la jornada de Paternatges Corresponsables que se celebró el pasado martes en Barcelona, donde intervinieron, entre otros, Pau Almuni, dando su visión de "qué es ser un padrazo"; Joaquim Montaner, el "papá" de Papas Blogueros contando todo su proceso en la formación de su comunidad y sus líneas de actuación para dar visibilidad y Mónica de La Fuente, la "mamá" de Madresfera, contando la irrupción de los Papás en el mundo de la comunidad de mamás 2.0, no quiero hacer un resumen de la misma, sino una reflexión a partir de nuestro caso en particular.
Papá Rosquillas estaba trabajando cuando me quedé embarazada en la empresa privada, como siempre ha hecho. Aquel verano sólo disfrutó de 10 días de vacaciones guardándose otras dos semanas más asuntos propios para que su permiso de paternidad fuera, no sólo de los 15 escasos días que le tocan por Ley, sino de 1 mes y medio y así poder estar con su hijo, implicado en su crianza desde el minuto 0 de su nacimiento. Cuando volvió a la empresa, casualmente un mes después de su incorporación, le resciendieron el contrato, sin más explicaciones. Le pagaron el finiquito correspondiente y durante los 4 meses siguientes compaginó el co-cuidado de Rosquis, junto a mí, con la búsqueda activa de empleo, envío de currículums, entrevistas de trabajo, etc. Sin su ayuda creo que nuestra lactancia no hubiera sido un éxito, gracias a que se levantaba por la noche, me daba agua, o me ayudaba a acunar a Rosquis. Se ocupaba -y se ocupa- de las tareas de la casa, no me dejaba llevar pesos: Mi posparto fue largo, lento y pesado, debido a la feroz episotomía, que ya os conté en mi Crónica de un parto no respetado.
La búsqueda de empleo dio sus frutos y Papá Rosquillas se volvió a reincorporar al mundo laboral cuando Rosquis tenía 5 meses, ya comía papillas de frutas y se aguantaba bastante bien sentado. Pero menuda sorpresa ver que en su nueva empresa se primaba más "calentar el asiento" hasta las tantas que salir a la hora y él, que tenía el trabajo hecho a tiempo y salía a su hora cada día, era objeto de miradas y comentarios por "salir temprano", cuando eran los demás compañeros los que "salían tarde" para "quedar bien con su jefe". Dos meses después, se volvió a ver de nuevo en el paro.
En esta ocasión tardó menos en encontrar trabajo, pues no paraban de llamarle y de hacer entrevistas. Aunque no pudo quedarse a trabajar en Barcelona tampoco, sino esta vez a 70 kms de distancia. Más de 12 horas de jornada laboral fuera de casa, sesgadas por dos horas de la comida, 2 horas que no necesita. ¿Qué ha intentado? Pues pedir 1 hora para comer y poder hacer una hora más de trabajo a mediodías para así el viernes hacer jornada intensiva. Pero como nadie más la hace, a él se le ha denegado. ¡Qué complicado es a veces ejercer de padre cuando sólo te dejan estar unas pocas horas al día a tu hijo! Y aún asi en esas horas, no parar un momento en casa, con el peque en el bucle de "baño-cena-dormir" un día tras otro, cansadísimo tras un madrugón considerable diario y una jornada partida por una comida no de "café, copa y puro", sino de tupper, que podría solucionarse en una hora. Y aunque venga cansado, siempre tiene una sonrisa o una broma para hacernos reir a mí y a Rosquis a tiempo... Bueno, no nos quejemos, diréis, que podría ser peor y tener que trabajar también en fines de semana, ¡claro!. Aún así ha pedido llegar más tarde para acompañarnos al pediatra o se ha pedido algunas horas libres para ir a mirar coles juntos, etc.
Si queremos una paternidad de igual a igual tendría que cambiar el panorama laboral: Empezar a sustituir la "cultura del presencialismo" por el de la productividad y el rendimiento en menos horas, dedicando el resto de la jornada a la conciliación familiar, como es el caso de los Países del Norte de Europa. ¿Y es que acaso los empresarios no saben que si un trabajador está feliz en su plano personal rinde más en el ámbito profesional? ¿Se necesitan realmente dos horas para comerse unos tuppers a mediodía, pudiendo trabajar una hora más y haciendo intensiva los viernes? Y aún así, Papá Rosquillas es un "papá sin tiempo o papá a full-time" que dedica todas sus pocas horas al salir del trabajo a su familia en exclusiva, que ha dejado de ver series y películas y que, sólo a mediodía se permite entrar al ForoCoches o leer un rato un libro. ¿A estos papás implicados no les correspondería un sistema tan implicado como ellos en la mejora de la conciliación familiar y laboral?
¿Nos contáis vuestra opinión o vuestra experiencia?
Papá Rosquillas estaba trabajando cuando me quedé embarazada en la empresa privada, como siempre ha hecho. Aquel verano sólo disfrutó de 10 días de vacaciones guardándose otras dos semanas más asuntos propios para que su permiso de paternidad fuera, no sólo de los 15 escasos días que le tocan por Ley, sino de 1 mes y medio y así poder estar con su hijo, implicado en su crianza desde el minuto 0 de su nacimiento. Cuando volvió a la empresa, casualmente un mes después de su incorporación, le resciendieron el contrato, sin más explicaciones. Le pagaron el finiquito correspondiente y durante los 4 meses siguientes compaginó el co-cuidado de Rosquis, junto a mí, con la búsqueda activa de empleo, envío de currículums, entrevistas de trabajo, etc. Sin su ayuda creo que nuestra lactancia no hubiera sido un éxito, gracias a que se levantaba por la noche, me daba agua, o me ayudaba a acunar a Rosquis. Se ocupaba -y se ocupa- de las tareas de la casa, no me dejaba llevar pesos: Mi posparto fue largo, lento y pesado, debido a la feroz episotomía, que ya os conté en mi Crónica de un parto no respetado.
La búsqueda de empleo dio sus frutos y Papá Rosquillas se volvió a reincorporar al mundo laboral cuando Rosquis tenía 5 meses, ya comía papillas de frutas y se aguantaba bastante bien sentado. Pero menuda sorpresa ver que en su nueva empresa se primaba más "calentar el asiento" hasta las tantas que salir a la hora y él, que tenía el trabajo hecho a tiempo y salía a su hora cada día, era objeto de miradas y comentarios por "salir temprano", cuando eran los demás compañeros los que "salían tarde" para "quedar bien con su jefe". Dos meses después, se volvió a ver de nuevo en el paro.
En esta ocasión tardó menos en encontrar trabajo, pues no paraban de llamarle y de hacer entrevistas. Aunque no pudo quedarse a trabajar en Barcelona tampoco, sino esta vez a 70 kms de distancia. Más de 12 horas de jornada laboral fuera de casa, sesgadas por dos horas de la comida, 2 horas que no necesita. ¿Qué ha intentado? Pues pedir 1 hora para comer y poder hacer una hora más de trabajo a mediodías para así el viernes hacer jornada intensiva. Pero como nadie más la hace, a él se le ha denegado. ¡Qué complicado es a veces ejercer de padre cuando sólo te dejan estar unas pocas horas al día a tu hijo! Y aún asi en esas horas, no parar un momento en casa, con el peque en el bucle de "baño-cena-dormir" un día tras otro, cansadísimo tras un madrugón considerable diario y una jornada partida por una comida no de "café, copa y puro", sino de tupper, que podría solucionarse en una hora. Y aunque venga cansado, siempre tiene una sonrisa o una broma para hacernos reir a mí y a Rosquis a tiempo... Bueno, no nos quejemos, diréis, que podría ser peor y tener que trabajar también en fines de semana, ¡claro!. Aún así ha pedido llegar más tarde para acompañarnos al pediatra o se ha pedido algunas horas libres para ir a mirar coles juntos, etc.
Si queremos una paternidad de igual a igual tendría que cambiar el panorama laboral: Empezar a sustituir la "cultura del presencialismo" por el de la productividad y el rendimiento en menos horas, dedicando el resto de la jornada a la conciliación familiar, como es el caso de los Países del Norte de Europa. ¿Y es que acaso los empresarios no saben que si un trabajador está feliz en su plano personal rinde más en el ámbito profesional? ¿Se necesitan realmente dos horas para comerse unos tuppers a mediodía, pudiendo trabajar una hora más y haciendo intensiva los viernes? Y aún así, Papá Rosquillas es un "papá sin tiempo o papá a full-time" que dedica todas sus pocas horas al salir del trabajo a su familia en exclusiva, que ha dejado de ver series y películas y que, sólo a mediodía se permite entrar al ForoCoches o leer un rato un libro. ¿A estos papás implicados no les correspondería un sistema tan implicado como ellos en la mejora de la conciliación familiar y laboral?
¿Nos contáis vuestra opinión o vuestra experiencia?
miércoles, 25 de mayo de 2016
#DÍADELORGULLOFRIKI: ¡FRIKI, Y A MUCHA HONRA!
Hoy 25 de mayo es el #DíaDelOrgulloFriki y va a escribiros mi álter-ego, @SoniadelFaces, una friki del cine. No sé medir qué grado de frikismo tengo, pero igual si os cuento un poquito mis emociones, me lo definís vosotr@s mejor.
-Hace unos años me leía todos los cómics y hacia colecciones de cromos, yendo muchos domingos al Mercat de Sant Antoni de Barcelona a cambiar los "repes" y a buscar "ocasiones".
-Aún canto la sintonía de Bola de Drac (Bola de Dragón) cuando la hacen cada noche a las 21h en El Club Super 3, así como la de Dragones y Mazmorras, por citar dos ejemplos.
-La primera peli del peque en cine fue Guardianes de la Galaxia en Cinema amb Nadons, con sólo 7 meses (foto) y alucinó ya con el "pepino" de espada galáctica que tenía en sus manos,
-He ido a la Dracarys Con (Convención del Juego de Tronos); al Salón de Cine y Series y al Festival de Sitges con toda la Familia Rosquillas, peque incluído. Se ha sentado con 9 meses en el Trono de Hierro (foto) y con 18 ha visitado el rodaje de la serie en escenarios gerundenses.
-Y me estoy planteando ir a celebrar a Arc de Triomf el sábado este día tan especial. Así que ya estoy en proceso de "frikerización" de Rosquis. ¿Se dejará?
-Cuando veo el nuevo tráiler de Star Trek, Star Trek Beyond, así en bucle, me sorprendo haciendo el saludo "trekkie". ¡Live long and prosper!
-Cuento los días que faltan para ver la nueva de El Doctor Extraño y de Assassins Creed y me regodeo con sus imágenes y tráilers on-line.
-Me gusta leer posts frikis que caen en mis manos y recuperar "Los 4 Chris de Cómic" del Faces.
-He disfrutado de Batman vs Superman: El Amanecer de la Justicia (bueno, en realidad, se me hizo bastante pesada) ; Capitán América: Civil War y X Men: Apocalipsis, las tres últimas adaptaciones DC/Marvel en pantalla grande, dos de ellas en Phenomena.
- Me he visto todos las películas de Vengadores, Star Trek, trilogías de Batman de Nolan, Spidermans, etc, etc y sé en cuál salía un personaje u otro y el Señor de Los Anillos y El Hobbit los tengo muy vistas y leídas también.
-Estoy entusiasmada con el Jóker, de Heath Ledger, el Batman, de Christian Bale, el Loki de Tom Hiddleston, el capitán Kirk de Chris Pine o el Star Lord de Guardianes de la Galaxia, por citar algunos, y espero con ansia a Fassbender como Aguilar y a Cumberbatch como Doctor Extraño y a Mads Mikkelsen como villano.
-Sólo me falta el capítulo de esta semana de "Juego de Tronos" para estar al día de las avanturas de Jon Nieve, Sansa Stark, Daenarys, Tyrion y compañía. Y me gustaría que Karl Drogo y Oberyn Martell "resucitaran". Papá Rosquillas y yo nos compramos (¡mejor dicho, se los regalé!) unos colgantes de "Moon of my life" y "My Sun and stars".
-He vestido esta mañana a mi pequeño Rosquis para la ocasión. ..Y olvidaba lo que es más fuerte...Mi hijo tiene el nombre de un superhéroe de cómic...
¡¡¡Live long and Prosper!!!
¡¡¡Que la Fuerza Os Acompañe!!!
¡¡¡Valar Morghulis!!!
Todo poder implica una gran resposabilidad...
Un anillo para controlarlos a todos...
¡¡¡Feliz Día del Orgullo Friki!!!
-Hace unos años me leía todos los cómics y hacia colecciones de cromos, yendo muchos domingos al Mercat de Sant Antoni de Barcelona a cambiar los "repes" y a buscar "ocasiones".
-Aún canto la sintonía de Bola de Drac (Bola de Dragón) cuando la hacen cada noche a las 21h en El Club Super 3, así como la de Dragones y Mazmorras, por citar dos ejemplos.
-La primera peli del peque en cine fue Guardianes de la Galaxia en Cinema amb Nadons, con sólo 7 meses (foto) y alucinó ya con el "pepino" de espada galáctica que tenía en sus manos,
-He ido a la Dracarys Con (Convención del Juego de Tronos); al Salón de Cine y Series y al Festival de Sitges con toda la Familia Rosquillas, peque incluído. Se ha sentado con 9 meses en el Trono de Hierro (foto) y con 18 ha visitado el rodaje de la serie en escenarios gerundenses.
-Y me estoy planteando ir a celebrar a Arc de Triomf el sábado este día tan especial. Así que ya estoy en proceso de "frikerización" de Rosquis. ¿Se dejará?
-Cuando veo el nuevo tráiler de Star Trek, Star Trek Beyond, así en bucle, me sorprendo haciendo el saludo "trekkie". ¡Live long and prosper!
-Cuento los días que faltan para ver la nueva de El Doctor Extraño y de Assassins Creed y me regodeo con sus imágenes y tráilers on-line.
-Me gusta leer posts frikis que caen en mis manos y recuperar "Los 4 Chris de Cómic" del Faces.
-He disfrutado de Batman vs Superman: El Amanecer de la Justicia (bueno, en realidad, se me hizo bastante pesada) ; Capitán América: Civil War y X Men: Apocalipsis, las tres últimas adaptaciones DC/Marvel en pantalla grande, dos de ellas en Phenomena.
- Me he visto todos las películas de Vengadores, Star Trek, trilogías de Batman de Nolan, Spidermans, etc, etc y sé en cuál salía un personaje u otro y el Señor de Los Anillos y El Hobbit los tengo muy vistas y leídas también.
-Estoy entusiasmada con el Jóker, de Heath Ledger, el Batman, de Christian Bale, el Loki de Tom Hiddleston, el capitán Kirk de Chris Pine o el Star Lord de Guardianes de la Galaxia, por citar algunos, y espero con ansia a Fassbender como Aguilar y a Cumberbatch como Doctor Extraño y a Mads Mikkelsen como villano.
-Sólo me falta el capítulo de esta semana de "Juego de Tronos" para estar al día de las avanturas de Jon Nieve, Sansa Stark, Daenarys, Tyrion y compañía. Y me gustaría que Karl Drogo y Oberyn Martell "resucitaran". Papá Rosquillas y yo nos compramos (¡mejor dicho, se los regalé!) unos colgantes de "Moon of my life" y "My Sun and stars".
-He vestido esta mañana a mi pequeño Rosquis para la ocasión. ..Y olvidaba lo que es más fuerte...Mi hijo tiene el nombre de un superhéroe de cómic...
¡¡¡Live long and Prosper!!!
¡¡¡Que la Fuerza Os Acompañe!!!
¡¡¡Valar Morghulis!!!
Todo poder implica una gran resposabilidad...
Un anillo para controlarlos a todos...
¡¡¡Feliz Día del Orgullo Friki!!!
lunes, 23 de mayo de 2016
MONTANDO "ALLALLO" EN LA ORENETA
Rosquis tiene una afición grande a los caballos, cualquier brazo de sillón de casa o pierna de familiar es susceptible de convertirse en un "allallo" improvisado, como él lo llama. Le encantan los animales, tanto domésticos como de granja, por ello, hemos ya visitado el zoo un par de veces, y en una ocasión, Granja Aventura Park y estamos planeando dos visitas más de cara el verano que impliquen ver animalitos.
Así que, tras la espinita que se nos quedó de que montara en uno de los ponis del zoo, tal como os expliqué en Visitando a los animalitos del zoo, ayer aprovechamos la mañana del domingo para ir al Parc de la Oreneta, que es una superficie boscosa en la falda de Collserola y la parte alta de Barcelona. Un gran parque en el que, además de las tradicionales áreas de juego, bancos y zonas de picnic hay dos elementos que lo hacen característico: Los trenes del Servei Ferroviari de Catalunya (pequeños trenecitos familiares al módico precio de 1,50 euros la vuelta) y los ponis y caballos para montar.
Así pues, tras pagar 8 euros, nos dieron un pequeño poni de pelaje negro, llamado Bombón. Rosquis se puso serio nada más montar a Bombón, pero no lloró, sino que pudimos hacer la ruta "xino-xano" por un circuito marcado ascendente que nos llevó desde las casetas de los caballos y de los ponis que vimos al llegar a dicha zona del parque hasta una pequeña esplanada a modo de "rodeo".
Al llegar al rodeo, Bombón comenzó a comer hierbajos y, a ratos, se paraba. Nosotros aprovechamos para capturar fotos y vídeo de la experiencia. Aunque casi todo el rato fue Papá Rosquillas el que condujo a Bombón, yo tomé "las riendas" en algún momento, aunque comprobé que era más dócil con él que conmigo, ya que no me hacía tanto caso. A la vuelta, Bombón decidió hacer pipi, un largo orín con el que Rosquis parecía estar bastante fascinado. (¡Nunca antes había visto orinar a un caballo!).
Fue una experiencia corta, de unos 20 minutos en los que Rosquis no quiso bajarse del caballo y estuvo bien contento. Aunque, como suele decirse, "lo bueno si breve, dos veces bueno". Y así nos vamos preparando para esas otras experiencias que tenemos planeadas para el final de verano y que ya os contaremos.
¿Han montado en poni o en caballo vuestros peques? ¿A qué edad? ¿Cómo fue la experiencia?
Así que, tras la espinita que se nos quedó de que montara en uno de los ponis del zoo, tal como os expliqué en Visitando a los animalitos del zoo, ayer aprovechamos la mañana del domingo para ir al Parc de la Oreneta, que es una superficie boscosa en la falda de Collserola y la parte alta de Barcelona. Un gran parque en el que, además de las tradicionales áreas de juego, bancos y zonas de picnic hay dos elementos que lo hacen característico: Los trenes del Servei Ferroviari de Catalunya (pequeños trenecitos familiares al módico precio de 1,50 euros la vuelta) y los ponis y caballos para montar.
Así pues, tras pagar 8 euros, nos dieron un pequeño poni de pelaje negro, llamado Bombón. Rosquis se puso serio nada más montar a Bombón, pero no lloró, sino que pudimos hacer la ruta "xino-xano" por un circuito marcado ascendente que nos llevó desde las casetas de los caballos y de los ponis que vimos al llegar a dicha zona del parque hasta una pequeña esplanada a modo de "rodeo".
Al llegar al rodeo, Bombón comenzó a comer hierbajos y, a ratos, se paraba. Nosotros aprovechamos para capturar fotos y vídeo de la experiencia. Aunque casi todo el rato fue Papá Rosquillas el que condujo a Bombón, yo tomé "las riendas" en algún momento, aunque comprobé que era más dócil con él que conmigo, ya que no me hacía tanto caso. A la vuelta, Bombón decidió hacer pipi, un largo orín con el que Rosquis parecía estar bastante fascinado. (¡Nunca antes había visto orinar a un caballo!).
Fue una experiencia corta, de unos 20 minutos en los que Rosquis no quiso bajarse del caballo y estuvo bien contento. Aunque, como suele decirse, "lo bueno si breve, dos veces bueno". Y así nos vamos preparando para esas otras experiencias que tenemos planeadas para el final de verano y que ya os contaremos.
¿Han montado en poni o en caballo vuestros peques? ¿A qué edad? ¿Cómo fue la experiencia?
viernes, 20 de mayo de 2016
CRÓNICA DE UN PARTO NO RESPETADO: EL DE ROSQUIS
Me sumo a la Semana Mundial del Parto respetado y contra la violencia obstétrica explicando como fue el mío. Rosquis tenía que nacer el 29 de diciembre, esa era mi FPP, pero nos pasamos las Navidades esperando, yo con el miedo en el cuerpo de todas las sensaciones que tenía y cada vez con la barriga más baja y contracciones, las falsas por lo que ahora sé, de Braxton-Hicks, así que me libré de muchas comidas y cenas familiares por ello. Mi ginecóloga me dijo que sino me ponía de parto me tendrían que inducir como máximo el 7 de enero (y yo acepté, con el miedo en el cuerpo y la creencia de que "mi Rosquis tenía que nacer por él solito", es decir, ponerme de parto sí o sí, pero no ocurrió.
Pasé el peor Día de Reyes que recuerdo, viendo películas y leyendo, negándome a salir a la calle y medio llorosa, aquella noche tan solo dormí 3 horas, hecha un manojo de nervios y le dije al futuro Papá Rosquillas que no me llevase a la Clínica, que no sería capaz de parir habiendo descansado tan poco. Pero fuimos, a las 8.30 de la mañana comenzó mi inducción, chutes de tubos de prostaglandinas para comenzar. Me dejaron beber un zumo y dos tostadas en casa y esa fue la única comida y bebida para la larga jornada que me aguardaba. La matrona iba y venía y me preguntaba, pero nos pasábamos las largas horas en una habitación "de dilatación", mi marido leyendo a ratos un libro o charlando conmigo y yo en la cama monitorizada, con una bata de esas terribles de hospital, abierta por detrás, esperando. Hacia mediodía decidieron inyectarme oxitocina sintética y romperme la bolsa, lo que me dio bastante angustia, tras hacerme un tacto y decirme que aún estaba muy verde y que teníamos allí para muchísimas horas. No sabía si reír o llorar, pero aguanté estoicamente. Llevaba una sonda urinaria para no tenerme que levantar ni ir al baño (de vientre ya había hecho aquella mañana sin enema). Pregunté si podía beber, pues tenía calor y la boca seca, y me lo negaron.
EXPULSIVO Y SEPARACIÓN FORZOSA
Las contracciones se empezaban a notar, cada vez más dolorosas y frecuentes, empezaba a sudar la gota gorda y, a la vez, era como un sudor frío. Vino un anestesista a ponerme la epidural, sacó de la habitación a mi marido y ahí sin comerlo ni beberlo, ya la tenía puesta, pero a mí me dolía horrores, aunque iba pasando el rato y en teoría tenía que hacer efecto. Allá a las 17h, la matrona me dijo que tenía una dilatación de 7-8cms, que vendría en dos horas a ver si estaba ya dilatada para ir al partitorio y que seguramente me libraría de la cesárea, cosa que en ese momento, me alegró bastante. Se cumplieron los pronósticos y antes de las 19h estaba en la sala de partos, era la primera vez que veía a mi ginecóloga. Me hicieron poner en posición de "piernas en alto", como se ve en las películas y me pidieron que empujara y lo hice, varios pujos fueron suficientes para decirme que salía bien, pero con "distocia", con la cabeza no rotada y que necesitarían fórceps para acabársela de girar. Cogí un poco d miedo, pero aguanté y allí salió. Es curioso que no lo oí llorar, pero es que tampoco lo vi manchado de sangre y placenta, sino que me lo pusieron encima ya aseado, con la ropita y el gorrito que habíamos elegido. Nos dijeron que los primeros tests de recién nacido habían salido exitosos.
Mi marido pidió de hacernos unas fotos a un anestesista y ese es el único recuerdo de nuestro hijo las 4 horas siguientes. Se lo llevaron mientras me cosían la enorme episotomía y no nos dieron más explicaciones, sabían que había pedido lactancia materna y no nos dejaron hacer el piel con piel ni establecerla, a pesar de nacer sano y majo (3.750 kgs y 51 cms.)
Cuando salí del paritorio vio a los abuelos, mis padres y mis suegros, quienes, tras preguntarme cómo estaba y decirme que tenía buen aspecto (aunque por su cara intuí que mentían, que estaría horrosoa), preguntaron por el niño. No obtuvimos respuesta. Ya en la habitación, tras insistir Papá Rosquillas nos dijeron que estaba en la visita pediátrica. ¿4 horas? A las 23h pude verle por pimera vez, la enfermera me lo aplastó contra mi pecho izquierdo de muy malos modos. Nos dijeron que cuando acabara de lactar se lo llevarían de nuevo a la nursery para que descansara hasta las 6h de la mañana, pero de madrugada pasaban enfermeras a controlarme la temperatura y darme medicación.
Los días que siguieron en el hospital los recuerdo en la cama, dando pecho o bien haciéndome las curas de la episotomía las enfermeras -que me hacían un daño terrible, no eran nada delicadas-, o dándome la cuña para hacer pipi y quitándome la sonda, picando a la puerta y amenazando que si no hacía pipi me llevaría la sonda a casa, y lo decían con mala uva y burla. Comí francamente mal aquellos días,nada me gustaba, sólo me consolaba poder tener a mi Rosquis día y noche a mi lado, en mi teta, que decir que, aparte de la familia y un par de amigos, no quise ni tener visitas (no me sentía de humor).
Me mandaron a casa a los 5 días del parto con la sonda urinaria y con la advertencia de que si no hacía pipi por mi misma tendría que volver a urgencias. Así que imaginaros, entre los llantos y malas noches, el dolor de la episotomía y cambiando la bolsa de la sonda cada x horas. En su momento no lo escribí, no pensé que fuera violencia obstétrica...Pero tener una episotomía de 20 puntos internos y externos, un peque separado de su mamá durante 4 horas sin causa médica y presiones por parir y para orinar, si es una forma de violencia. Todo ocurrió en la Clínica del Pilar un 7 de enero de 2014, el día más feliz de mi vida que también fue un poco triste. Lo único que me consuela es que, a pesar de las dificultades que nos pusieron y los obstáculos para el piel con piel, pudimos establecer la lactancia sin problemas hasta día de hoy.
Si tuviera otro hijo, que no creo que sea el caso, redactaría claramente un plan de parto y buscaría un equipo que me respetara. Este relato era una "espinita dolorosa" que aún tenía clavada y he querido compartir porque sea que hay más casos y merecen salir a la luz.
¿Cómo fue vuestro parto y estancia en el hospital? ¿Os sentistéis respetadas?
Pasé el peor Día de Reyes que recuerdo, viendo películas y leyendo, negándome a salir a la calle y medio llorosa, aquella noche tan solo dormí 3 horas, hecha un manojo de nervios y le dije al futuro Papá Rosquillas que no me llevase a la Clínica, que no sería capaz de parir habiendo descansado tan poco. Pero fuimos, a las 8.30 de la mañana comenzó mi inducción, chutes de tubos de prostaglandinas para comenzar. Me dejaron beber un zumo y dos tostadas en casa y esa fue la única comida y bebida para la larga jornada que me aguardaba. La matrona iba y venía y me preguntaba, pero nos pasábamos las largas horas en una habitación "de dilatación", mi marido leyendo a ratos un libro o charlando conmigo y yo en la cama monitorizada, con una bata de esas terribles de hospital, abierta por detrás, esperando. Hacia mediodía decidieron inyectarme oxitocina sintética y romperme la bolsa, lo que me dio bastante angustia, tras hacerme un tacto y decirme que aún estaba muy verde y que teníamos allí para muchísimas horas. No sabía si reír o llorar, pero aguanté estoicamente. Llevaba una sonda urinaria para no tenerme que levantar ni ir al baño (de vientre ya había hecho aquella mañana sin enema). Pregunté si podía beber, pues tenía calor y la boca seca, y me lo negaron.
EXPULSIVO Y SEPARACIÓN FORZOSA
Las contracciones se empezaban a notar, cada vez más dolorosas y frecuentes, empezaba a sudar la gota gorda y, a la vez, era como un sudor frío. Vino un anestesista a ponerme la epidural, sacó de la habitación a mi marido y ahí sin comerlo ni beberlo, ya la tenía puesta, pero a mí me dolía horrores, aunque iba pasando el rato y en teoría tenía que hacer efecto. Allá a las 17h, la matrona me dijo que tenía una dilatación de 7-8cms, que vendría en dos horas a ver si estaba ya dilatada para ir al partitorio y que seguramente me libraría de la cesárea, cosa que en ese momento, me alegró bastante. Se cumplieron los pronósticos y antes de las 19h estaba en la sala de partos, era la primera vez que veía a mi ginecóloga. Me hicieron poner en posición de "piernas en alto", como se ve en las películas y me pidieron que empujara y lo hice, varios pujos fueron suficientes para decirme que salía bien, pero con "distocia", con la cabeza no rotada y que necesitarían fórceps para acabársela de girar. Cogí un poco d miedo, pero aguanté y allí salió. Es curioso que no lo oí llorar, pero es que tampoco lo vi manchado de sangre y placenta, sino que me lo pusieron encima ya aseado, con la ropita y el gorrito que habíamos elegido. Nos dijeron que los primeros tests de recién nacido habían salido exitosos.
Mi marido pidió de hacernos unas fotos a un anestesista y ese es el único recuerdo de nuestro hijo las 4 horas siguientes. Se lo llevaron mientras me cosían la enorme episotomía y no nos dieron más explicaciones, sabían que había pedido lactancia materna y no nos dejaron hacer el piel con piel ni establecerla, a pesar de nacer sano y majo (3.750 kgs y 51 cms.)
Cuando salí del paritorio vio a los abuelos, mis padres y mis suegros, quienes, tras preguntarme cómo estaba y decirme que tenía buen aspecto (aunque por su cara intuí que mentían, que estaría horrosoa), preguntaron por el niño. No obtuvimos respuesta. Ya en la habitación, tras insistir Papá Rosquillas nos dijeron que estaba en la visita pediátrica. ¿4 horas? A las 23h pude verle por pimera vez, la enfermera me lo aplastó contra mi pecho izquierdo de muy malos modos. Nos dijeron que cuando acabara de lactar se lo llevarían de nuevo a la nursery para que descansara hasta las 6h de la mañana, pero de madrugada pasaban enfermeras a controlarme la temperatura y darme medicación.
Los días que siguieron en el hospital los recuerdo en la cama, dando pecho o bien haciéndome las curas de la episotomía las enfermeras -que me hacían un daño terrible, no eran nada delicadas-, o dándome la cuña para hacer pipi y quitándome la sonda, picando a la puerta y amenazando que si no hacía pipi me llevaría la sonda a casa, y lo decían con mala uva y burla. Comí francamente mal aquellos días,nada me gustaba, sólo me consolaba poder tener a mi Rosquis día y noche a mi lado, en mi teta, que decir que, aparte de la familia y un par de amigos, no quise ni tener visitas (no me sentía de humor).
Me mandaron a casa a los 5 días del parto con la sonda urinaria y con la advertencia de que si no hacía pipi por mi misma tendría que volver a urgencias. Así que imaginaros, entre los llantos y malas noches, el dolor de la episotomía y cambiando la bolsa de la sonda cada x horas. En su momento no lo escribí, no pensé que fuera violencia obstétrica...Pero tener una episotomía de 20 puntos internos y externos, un peque separado de su mamá durante 4 horas sin causa médica y presiones por parir y para orinar, si es una forma de violencia. Todo ocurrió en la Clínica del Pilar un 7 de enero de 2014, el día más feliz de mi vida que también fue un poco triste. Lo único que me consuela es que, a pesar de las dificultades que nos pusieron y los obstáculos para el piel con piel, pudimos establecer la lactancia sin problemas hasta día de hoy.
Si tuviera otro hijo, que no creo que sea el caso, redactaría claramente un plan de parto y buscaría un equipo que me respetara. Este relato era una "espinita dolorosa" que aún tenía clavada y he querido compartir porque sea que hay más casos y merecen salir a la luz.
¿Cómo fue vuestro parto y estancia en el hospital? ¿Os sentistéis respetadas?
miércoles, 18 de mayo de 2016
#ELTEMADELASEMANA: UN RECUERDO QUE TE HAGA SEGUIR ADELANTE
#ELTDMS, #ElTemaDeLaSemana que no proponen Papas Blogueros es que expliquemos un recuerdo que nos ayude a salir adelante. A mí algo que me recarga las pilas es mirar álbums de fotos, que es algo que me encanta, sea en digital, en PC, en móvil, o de la manera tradicional, es decir, los álbumes de papel de toda la vida. Siempre me ha gustado hacerlo, soy una nostálgica, pero aún más desde que está Rosquis.
¿Qué veo en ellos que me inspira tanto? Una sucesión de momentos especiales, únicos, aunque no sean precisamente celebraciones, sino situaciones de la vida cotidiana: Un día de parque, un juguete nuevo, cómo se quedaba dormidito en mis brazos sonriendo después de teta cuando era un bebé, ese día que Papá; sus primer gateo; sus travesurillas en casa; el día en que Papá Rosquillas y él se fueron a pasear y a "hacer el gamberro" dos chicos solos; esas primeras vacaciones juntos...
En todas las fotos veo también el paso del tiempo, inevitablemente, cómo crecemos todos, unos para más "viejos" y otro de bebé a niño. Todas esas imágenes, tomadas de manera casual, espontánea, o bien "fotos preparadas", me encantan porque conforman mi vida cotidiana y lo que soy, he sido y seré. ¡No hay nada mejor cuándo estoy de bajón que revisar, una y otra vez, esos fragmentos de vida de mi familia, esos recuerdos infinitos en forma de fotografías!
Y para hacer este post ya he tenido excusa para repasar algunos álbums digitales y escoger entre miles y millones, dos de ellas que me encantan, no tiene nada especial diréis, quizás, pero me inspiran mucha ternura. Una es de Rosquis con 5 mesecitos jugando con su padre durante nuestras primeras vacaciones en familia y la segunda es porteado por primer vez por mi padre con 18 meses por las Ramblas de Barcelona.
¿Y a vosostros, qué recuerdo os hace tirar adelante?
martes, 17 de mayo de 2016
LA BIBLIO DE ROSQUIS: "ELLA Y LA ELEFANTA ELEGANTE"
Nos ha llegado recientemente Ella y la elefanta elegante, de Carmela y Steven de Amico, gracias a Literatura SM. Es un cuento sobre una elefanta que vivía en las Islas Elefante, llamada Ella. La pequeña elefanta estaba un poquito nerviosa con la idea de ir al cole, porque no sabía si haría amigos. Un día en el desván de casa se encuentra un sombrero rojo en una caja, "el sombrero de la suerte", según decía a su abuela, y decide llevarlo a la escuela el primer día de clase.
Con el sombrero comienzan también los problemas: Empieza a tapar a los demás estudiantes -por lo que se ha de sentar en la última fila-, resulta el objetivo de burlas de sus compañeros, en especial de Belinda, y se siente marginada y sola.
Un día a a hora del recreo, Belinda lanza la pelota encima del muro y obliga a Ella a que trepe pero, finalmente, tras una disputa es Belinda la que trepa el muro y cuando va a lanzarla, pierde el equilibrio. Entonces sube Ella con su "sombrero de la suerte" al rescate y pasa lo más mágico e impensable...¡Y hasta ahí podemos leer, no os penséis que os vamos a desvelar toda la historia!
Rosquis, que aún no habla fluido a sus 28 meses, le gusta ver sus ilustraciones y señalar a Ella y a su "sombrero de la suerte", pues a él siempre le han fascinado los animalitos y los sombreros y gorras, ¡y además es de color rojo!- y, a veces, comienza a pasar páginas con impaciencia para avanzar en la historia y llegar más rápidamente hasta el clímax final. Una tarde que vino un amiguito a casa a merendar, que está a punto de cumplir 4 años y que también le encantan los animales -siempre quiere ir a ver los elefantes al zoo-, le sacamos el libro y lo devoraba literalmente. Así que pasaron un rato bien distraídos con el cuento.
Es una historia que habla a los más peques sobre dos temas tan importantes como son la integración de un nuevo miembro en un grupo y la celebración de la diferencia.
¡Nos ha gustado! Sólo ponemos un "pero" para los lectores más pequeños o más "destroyer": Las tapas son duras, pero sus hojas no, y si se emocionan mucho pueden acabar bastante arrugadas o rotas.
Ficha técnica
"Ella y la Elefanta Elegante"
Literatura SM
Autor: Carmela y Steven de Amico.
Págs: 56
ISBN: 978-84-675-8775-3
Precio: 12,95
Edad orientativa: de 3 a 5 años.
Con el sombrero comienzan también los problemas: Empieza a tapar a los demás estudiantes -por lo que se ha de sentar en la última fila-, resulta el objetivo de burlas de sus compañeros, en especial de Belinda, y se siente marginada y sola.
Un día a a hora del recreo, Belinda lanza la pelota encima del muro y obliga a Ella a que trepe pero, finalmente, tras una disputa es Belinda la que trepa el muro y cuando va a lanzarla, pierde el equilibrio. Entonces sube Ella con su "sombrero de la suerte" al rescate y pasa lo más mágico e impensable...¡Y hasta ahí podemos leer, no os penséis que os vamos a desvelar toda la historia!
Rosquis, que aún no habla fluido a sus 28 meses, le gusta ver sus ilustraciones y señalar a Ella y a su "sombrero de la suerte", pues a él siempre le han fascinado los animalitos y los sombreros y gorras, ¡y además es de color rojo!- y, a veces, comienza a pasar páginas con impaciencia para avanzar en la historia y llegar más rápidamente hasta el clímax final. Una tarde que vino un amiguito a casa a merendar, que está a punto de cumplir 4 años y que también le encantan los animales -siempre quiere ir a ver los elefantes al zoo-, le sacamos el libro y lo devoraba literalmente. Así que pasaron un rato bien distraídos con el cuento.
Es una historia que habla a los más peques sobre dos temas tan importantes como son la integración de un nuevo miembro en un grupo y la celebración de la diferencia.
¡Nos ha gustado! Sólo ponemos un "pero" para los lectores más pequeños o más "destroyer": Las tapas son duras, pero sus hojas no, y si se emocionan mucho pueden acabar bastante arrugadas o rotas.
Ficha técnica
"Ella y la Elefanta Elegante"
Literatura SM
Autor: Carmela y Steven de Amico.
Págs: 56
ISBN: 978-84-675-8775-3
Precio: 12,95
Edad orientativa: de 3 a 5 años.
jueves, 12 de mayo de 2016
#ELTEMADELASEMANA: MIS DOS FIGURAS INSPIRADORAS EN MI VIDA
#ElTemaDeLaSemana en Papás Blogueros es hablar de nuestras figuras de inspiradoras, de referencia. Y cuando pienso en ello, me vienen a la cabeza dos.
Mi abuela materna, Rosario, que en el cielo esté, que era una yaya ejemplar, tendría su genio y sus manías como todos, pero si la hubieráis conocido era amor: Enérgica, decidida, buena cocinera y muy cariñosa. Subió a dos hijos más otro que se le quedó en el camino. En aquella época (años 40 del siglo pasado) mi abuelo trabajaba un montón de horas -y los hombre no estaban tan implicados como ahora, ¡para qué nos vamos a engañar!- , así que asumió la crianza ella sola prácticamente y ayudó muchísimo a mi madre con mi crianza y educación, siempre dispuesta a ayudar. La recuerdo en casa yendo y viniendo hasta los 19 años en que la vi por última vez.
Otra figura inspiradora actual es mi hijo. Me ha sacado de mi "flor de loto" y de mi zona de confort lanzándome a la arena de la maternidad. Me salió llorón, gritón y demandante de bebé, muy movido, un tanto caprichoso y mal comedor, pero también ha dado sentido a las palabra amor, sacrificio, entrega y paciencia (¡bueno, esto último reconozco que lo he de cultivar más!). Es mi referencia por su carisma y su falta de miedo, su arrojo frente a la vida, y porque es más activo de lo que yo nunca lo fui ni lo seré (¡y que me ha ayudado a activarme y de qué modo!.
Así que no me alargó más...Lo único que lamento es que mi yaya Rosario y Rosquis no se hayan conocido, seguro que estarían prendados el uno por el otro.
domingo, 8 de mayo de 2016
GESTIONANDO HIJOS: COMO #EDUCARMEJOR PARA QUE SEAN MEJORES PERSONAS
Érase una vez un Palacio de Congresos en Barcelona que hervía de emociones. No era para un miting político ni la espera de un cantante famoso, sino que eran madres, padres, profesores y educadores que esperaban una mañana lluviosa de sábado, ser tocados por la magia de un tema crucial: La educación. Y la hubo, magia y reflexión, diversión y emoción. Muchas ideas flotando en el aire sobre cómo educar a nuestros peques y cómo hacerlo aún mejor: #educarmejor, sin duda, un hastag adecuado para la ocasión.
Eva Bach se encargó de poner "en la familia cada uno en su lugar", es decir, saber poner a cada uno de los padres en un plano de igualdad (destacando lo que nos gusta del padre y de su familia, no sólo sus defectos), de recordarnos que la pareja se ha de respetar y cuidar siendo los padres y madres modelos de masculinidad y feminidad para nuestros hijos. Asimismo, nos instó a asumir las responsabilidad y limitaciones, cooperar entre ambos y no dimitir. Y evitando dos males comunes: La sobreprotección de los hijos, estando fuera de lugar (no hay que ser ni padres helicóptero,ni drones, ni mayordomos, ni perchero ni bocadillo) y la proyección de nuestras emociones no resueltas en ellos (si yo quise ser pianista o futbolista quiero que lo sean los peques, tengan o no aptitudes para ello). Así pues, podríamos concluir que los padres hemos de actuar como adultos maduros y responsables que apoyemos a nuestros hijos y les permitamos soñar.
Carme Cabestany, de la organización de No al Acoso, nos puso los pelos de punta y sacó nuestras emociones al leernos la carta de Lola, una joven que fue acosada sistemáticamente por un compañero de clase durante 4 años, sufriendo abusos verbales e incluso físicos. Realmente abogó por buscar soluciones de inmediato y por la Tolerancia 0 en casos de Acoso Escolar. Siendo necesario respaldar a la víctima en todo momento y ayudarla, así como ofrecer ayuda psicológica al acosador, pues ni la víctima es "rarita" y merecedora de ser acosada, ni el acosador es un demonio, sino alguien que sufre también algún problema en su vida y por ello se dedica a acosar. También nos recorrió un escalofrío al escuchar entre el público a la hermana de una chica acosada que se había suicidado con 27 años, incapaz de superarlo. En definitiva, que el Acoso Escolar es un tema de primer orden que nos concierne a todos porque podemos ser padres de acosados, acosadores o testigos de acoso.
La siguiente ponencia, "Educar en mágico" fue un soplo de aire fresco. Fernando Botella junto al mago Iván Santacruz, Papá Mago, nos hicieron reflexionar a la par que reír con los trucos de magia de Papá Mago. Una de las claves es sorprenderse cada día y vivir desde la humildad. Abogando por vivir con un humor caórdico (del caos que pesigue el orden) para ser capaces de "cocrear", que es concetrarse para poder crear. Y nos adviertieron que padecemos "el síndrome de la z", que debemos jugar más y juzgar menos. Así pues, la actitud frente a la vida ha de ser de ilusión, de sorpresa, de juego...Porque "un día sin sonrisa y sin amor es un día perdido". Y preguntarnos cada día: ¿Qué hemos hecho hoy con nuestros hijos?
Cristina Gutiérrez nos habló de la importancia de "la comunicación, gran aliada de la educación". Plantándonos: ¿Tenéis que educar a vuestros hijos o queréis hacerlo? nos dio algunas pistas para facilitar la comunicación entre padres e hijos. Siempre hay que reforzar la autonomía y la autoestima de los pequeños, hacerles preguntas interesantes para su vida y darles mensajes en positivo, tales como "seas quién seas y como seas, siempre te querré igual"; "me gusta escucharte"; "yo no me rindo, ¿y tú?, "confío en tí", para ayudarlos a ser personas y a crecer porque el mundo "tiene el camino de tus sueños".
Aparte de poesía y buenas palabras y pensamientos, ¿qué tal si lo ponemos en práctica? Parece sencillo, pero ¿lo es en realidad?, iba yo pensando mientras escuchaba.
Tras el descanso en el que me dediqué a desvirtualizar y a charlar con compis bloggers, igual que a la llegada, empezamos la segunda parte, tan o más intensa que lo había sido la primera.
Carles Capdevila se metió, como siempre, el auditorio entregado en el bolsillo, con una de las ponencias más divertidas que se recuerdan. Y preguntándose cómo era posible que hibiera 200 manuales de embarazo (si no hay que hacer nada excepto esperar) y tan pocos sobre educación, cuando "educar no es parir", sino que va mucho más allá. Nos recordó, entre bromas, cómo la gente confunde, a menudo, el tamaño de los niños con el tamaño de responsabilidad que supone educarlos. E hizo una oda a los maestros, quienes han de querer más a los alumnos que a su asignatura, abogando por unos maestros más animados y optimistas en nuestra sociedad.
Alba Alonso Feijoo nos dejó en manos de una madre histérica y llena de estereotipos sobre el género para hacernos reflexionar, entre risas, que no se trata de llevar mochilas rosas para niñas y de superhéroes para niños, sino que se ha de llenar la mochila de los pequeños de buenos imputs y "sin etiquetas" de ningún tipo, ni condicionantes de género. En esta mochila ideal hay que llevar la belleza (y no sólo física y exterior), la valentía, el respeto (por lo diferente, en especial), los sentimientos y el espacio libre. En definitiva, que hay que llenar la mochila de felicidad, amor y respeto, consiguiendo una educación libre de etiquetas.
Jaume Centelles nos habló sobre la educación a través de la lectura, fomentando la curiosidad de nuestros hijos a través de los libros. Nos dijo que no sólo era necesario hacer lectura compartida con nuestros peques, sinó que además, estaba demostrado que 6 minutos de lectura concentrada era beneficiosa para la salud. Así pues, las familias hemos de ser cómplices y educarlos en la literatura tanro oral como escrita.
Jorge Salinas nos habló de la necesidad de "educar para elegir". Teniendo en cuenta que no hay que sobreprotegerlos (pues se trata de una "agresión encubierta", que no deja ser al otro), hay que actuar con generosidad, dejando espacio para que nos den, crezcan y se desarrollen como personas, siendo asertivos con ellos (diciendo lo que pensamos y dejando que se puedan expresar). Nuestros hijos tienen todo el derecho de conducir su propia vida y la tarea de nosotros como padres es de ejercer de mentores, de aceptarlos como son, ayudándoles a diferenciar lo que desean hacer de lo que quieren ser. Y lo que es más importante, que a nuestros hijos no les quepa la menos duda de que hagan lo que hagan siempre vamos a estar a su lado.
Sónsoles Onega fue la encargada de cerrar la mañana con "nosotras, nosotros que lo quisimos todo" en el que puso de manifiesto que las mujeres y madres llevamos la carga y el peso del hogar, el llamado "management familiar" y que curramos más que ellos. Y la sociedad aún sigue siendo rígida e inflexible en horarios laborales. Abogó por la necesidad de una mujer que no renuncia a ninguna de sus parcelas, ni de madre, ni de esposa, ni de mujer trabajadora, etc. Cuándo pronunció la etiqueta "padrazos" fue cuando dos Papás Blogueros, David Lay y Manolo "Tropocolo" subieron al escenario a reivindicar esta nueva generación de padres implicados en la crianza y la educación de los hijos, que miran de igual a igual a su mujer, a su familia y a sus hijos.
Lástima de su corta intervención y de ver que todo se había terminado. Que salía de allí con mil ideas sobre educación en la cabeza, que tenía que ordenar y dar un sentido. O mejor dicho, que todo seguía y comenzaba de nuevo. Volviendo a casa a reunirme con Rosquis (en mi caso) y hacerle sentir mi hijo, la persona más importante del mundo: La pequeña personita con la que tengo un reto y un compromiso vital. ¿Y cuál es? Educarlo y ayudarlo en su camino por la vida para que se convierta en la mejor persona posible, libre, feliz, soñadora y sin etiquetas, ni prejuicios. Esto sería lo ideal, pero como decía una mami no blogger, amiga mía, que fue a dos talleres el viernes, esto es sólo la teoría y ahora queda ponerlo en práctica. ¿Lo conseguiremos?
Ah! Y no quiero olvidarme de agradecer a Papás Blogueros por poder estar allí. Ya que me tocó la entrada en su Sorteo.
Eva Bach se encargó de poner "en la familia cada uno en su lugar", es decir, saber poner a cada uno de los padres en un plano de igualdad (destacando lo que nos gusta del padre y de su familia, no sólo sus defectos), de recordarnos que la pareja se ha de respetar y cuidar siendo los padres y madres modelos de masculinidad y feminidad para nuestros hijos. Asimismo, nos instó a asumir las responsabilidad y limitaciones, cooperar entre ambos y no dimitir. Y evitando dos males comunes: La sobreprotección de los hijos, estando fuera de lugar (no hay que ser ni padres helicóptero,ni drones, ni mayordomos, ni perchero ni bocadillo) y la proyección de nuestras emociones no resueltas en ellos (si yo quise ser pianista o futbolista quiero que lo sean los peques, tengan o no aptitudes para ello). Así pues, podríamos concluir que los padres hemos de actuar como adultos maduros y responsables que apoyemos a nuestros hijos y les permitamos soñar.
Carme Cabestany, de la organización de No al Acoso, nos puso los pelos de punta y sacó nuestras emociones al leernos la carta de Lola, una joven que fue acosada sistemáticamente por un compañero de clase durante 4 años, sufriendo abusos verbales e incluso físicos. Realmente abogó por buscar soluciones de inmediato y por la Tolerancia 0 en casos de Acoso Escolar. Siendo necesario respaldar a la víctima en todo momento y ayudarla, así como ofrecer ayuda psicológica al acosador, pues ni la víctima es "rarita" y merecedora de ser acosada, ni el acosador es un demonio, sino alguien que sufre también algún problema en su vida y por ello se dedica a acosar. También nos recorrió un escalofrío al escuchar entre el público a la hermana de una chica acosada que se había suicidado con 27 años, incapaz de superarlo. En definitiva, que el Acoso Escolar es un tema de primer orden que nos concierne a todos porque podemos ser padres de acosados, acosadores o testigos de acoso.
La siguiente ponencia, "Educar en mágico" fue un soplo de aire fresco. Fernando Botella junto al mago Iván Santacruz, Papá Mago, nos hicieron reflexionar a la par que reír con los trucos de magia de Papá Mago. Una de las claves es sorprenderse cada día y vivir desde la humildad. Abogando por vivir con un humor caórdico (del caos que pesigue el orden) para ser capaces de "cocrear", que es concetrarse para poder crear. Y nos adviertieron que padecemos "el síndrome de la z", que debemos jugar más y juzgar menos. Así pues, la actitud frente a la vida ha de ser de ilusión, de sorpresa, de juego...Porque "un día sin sonrisa y sin amor es un día perdido". Y preguntarnos cada día: ¿Qué hemos hecho hoy con nuestros hijos?
Cristina Gutiérrez nos habló de la importancia de "la comunicación, gran aliada de la educación". Plantándonos: ¿Tenéis que educar a vuestros hijos o queréis hacerlo? nos dio algunas pistas para facilitar la comunicación entre padres e hijos. Siempre hay que reforzar la autonomía y la autoestima de los pequeños, hacerles preguntas interesantes para su vida y darles mensajes en positivo, tales como "seas quién seas y como seas, siempre te querré igual"; "me gusta escucharte"; "yo no me rindo, ¿y tú?, "confío en tí", para ayudarlos a ser personas y a crecer porque el mundo "tiene el camino de tus sueños".
Aparte de poesía y buenas palabras y pensamientos, ¿qué tal si lo ponemos en práctica? Parece sencillo, pero ¿lo es en realidad?, iba yo pensando mientras escuchaba.
Tras el descanso en el que me dediqué a desvirtualizar y a charlar con compis bloggers, igual que a la llegada, empezamos la segunda parte, tan o más intensa que lo había sido la primera.
Carles Capdevila se metió, como siempre, el auditorio entregado en el bolsillo, con una de las ponencias más divertidas que se recuerdan. Y preguntándose cómo era posible que hibiera 200 manuales de embarazo (si no hay que hacer nada excepto esperar) y tan pocos sobre educación, cuando "educar no es parir", sino que va mucho más allá. Nos recordó, entre bromas, cómo la gente confunde, a menudo, el tamaño de los niños con el tamaño de responsabilidad que supone educarlos. E hizo una oda a los maestros, quienes han de querer más a los alumnos que a su asignatura, abogando por unos maestros más animados y optimistas en nuestra sociedad.
Alba Alonso Feijoo nos dejó en manos de una madre histérica y llena de estereotipos sobre el género para hacernos reflexionar, entre risas, que no se trata de llevar mochilas rosas para niñas y de superhéroes para niños, sino que se ha de llenar la mochila de los pequeños de buenos imputs y "sin etiquetas" de ningún tipo, ni condicionantes de género. En esta mochila ideal hay que llevar la belleza (y no sólo física y exterior), la valentía, el respeto (por lo diferente, en especial), los sentimientos y el espacio libre. En definitiva, que hay que llenar la mochila de felicidad, amor y respeto, consiguiendo una educación libre de etiquetas.
Jaume Centelles nos habló sobre la educación a través de la lectura, fomentando la curiosidad de nuestros hijos a través de los libros. Nos dijo que no sólo era necesario hacer lectura compartida con nuestros peques, sinó que además, estaba demostrado que 6 minutos de lectura concentrada era beneficiosa para la salud. Así pues, las familias hemos de ser cómplices y educarlos en la literatura tanro oral como escrita.
Jorge Salinas nos habló de la necesidad de "educar para elegir". Teniendo en cuenta que no hay que sobreprotegerlos (pues se trata de una "agresión encubierta", que no deja ser al otro), hay que actuar con generosidad, dejando espacio para que nos den, crezcan y se desarrollen como personas, siendo asertivos con ellos (diciendo lo que pensamos y dejando que se puedan expresar). Nuestros hijos tienen todo el derecho de conducir su propia vida y la tarea de nosotros como padres es de ejercer de mentores, de aceptarlos como son, ayudándoles a diferenciar lo que desean hacer de lo que quieren ser. Y lo que es más importante, que a nuestros hijos no les quepa la menos duda de que hagan lo que hagan siempre vamos a estar a su lado.
Sónsoles Onega fue la encargada de cerrar la mañana con "nosotras, nosotros que lo quisimos todo" en el que puso de manifiesto que las mujeres y madres llevamos la carga y el peso del hogar, el llamado "management familiar" y que curramos más que ellos. Y la sociedad aún sigue siendo rígida e inflexible en horarios laborales. Abogó por la necesidad de una mujer que no renuncia a ninguna de sus parcelas, ni de madre, ni de esposa, ni de mujer trabajadora, etc. Cuándo pronunció la etiqueta "padrazos" fue cuando dos Papás Blogueros, David Lay y Manolo "Tropocolo" subieron al escenario a reivindicar esta nueva generación de padres implicados en la crianza y la educación de los hijos, que miran de igual a igual a su mujer, a su familia y a sus hijos.
Lástima de su corta intervención y de ver que todo se había terminado. Que salía de allí con mil ideas sobre educación en la cabeza, que tenía que ordenar y dar un sentido. O mejor dicho, que todo seguía y comenzaba de nuevo. Volviendo a casa a reunirme con Rosquis (en mi caso) y hacerle sentir mi hijo, la persona más importante del mundo: La pequeña personita con la que tengo un reto y un compromiso vital. ¿Y cuál es? Educarlo y ayudarlo en su camino por la vida para que se convierta en la mejor persona posible, libre, feliz, soñadora y sin etiquetas, ni prejuicios. Esto sería lo ideal, pero como decía una mami no blogger, amiga mía, que fue a dos talleres el viernes, esto es sólo la teoría y ahora queda ponerlo en práctica. ¿Lo conseguiremos?
Ah! Y no quiero olvidarme de agradecer a Papás Blogueros por poder estar allí. Ya que me tocó la entrada en su Sorteo.
jueves, 5 de mayo de 2016
CÓMO AFRONTAR EL CORTE DE PELO DE LOS PEQUES...Y NO MORIR EN EL INTENTO
He de reconocer que Rosquis ha ido poco a la peluquería. Sólo 2 veces y sin repetir local. A los 18 meses decidimos que los largos mechones sumados a los comentarios de "¡qué guapa que es la niña!" eran suficientes motivos para dar el paso. Tampoco Mamá Rosquillas es muy de pelu, con suerte, me ven la melena las tijeras, los peinadores y los secadores dos veces al año, así que no soy de aquellas que cada semana tiene cita con el salón de belleza para...¿quizás desestresarse y hablar? ¿O realmente se puede una arreglar el pelo cada semana fuera de casa? Sea como fuere, dejémonos de reflexiones, y vamos al kit de la cuestión.
La primera vez, decidí llevarle a mi peluquera, bueno, a la que fui para mi boda y he ido de vez en cuando, que quizás es con la que tenemos más confianza. Pero cometimos el error de que Papá Rosquillas se cortase los cuatro pelos el mismo día y Rosquis se comenzó a impacientar. No quería estar en la trona con los juguetes que le pusimos a disposición, sino que quería ir arriba y abajo por el local y no podía ser. Así que la buena mujer hizo lo que pudo, vistas las circunstancias y las prisas, y le dejó con cara de chico, eso sí, como vereis en la foto. ¡Y además, no nos cobró nada!. Pero a mí no me parecía él. Nos fuimos de vacaciones y por más que le miraba me costaba encontrar a Rosquis en ese nuevo look, parecía que con el pelo corto se le hubiese ido una parte de sus señas de identidad. Su fuerza no la había perdido, cuál Sansón, ¡eso no!
La segunda vez fue el fin de semana pasado. Su padre conocía una pelu de la zona, donde se había cortado el pelo por cercanía y comodidad, y decidimos llevarle. Por suerte, daban horas y eso nos garantizaría, si eran cumplidores y organizados, no tenernos que esperar. Además, iba a ser una tarde en exclusiva para él, ninguno de nosotros aprovecharía para "arreglarse". Comenzamos un poquito revueltos, pues primero no se quería dejar mojar el pelo con el spray, pero al ver que la "xampoonier" se lo hacía a su padre, decidió acceder. Le puso peinador a su padre, a Rosquis una toalla, puesto que no se dejó más y se sentó encima de su padre. Con tranquilidad, cumplió con todo, si le decían, baja la cabeza, la bajaba o que la girase, pues lo hacía. Cuando le propusieron cerrar los ojos, para que no le entrasen los pequeños pelitos, él no lo vio tan claro, aunque finalmente, lo hizo. Así que en 15 minutos estuvo listo. El peluquero se maravillaba de lo bien que se había portado y alababa su belleza, ¿esta gente son todos así?.
En casa, le lavamos el pelo, como siempre hacemos en el baño y, al secarle emergió "Closquis", el nuevo Rosquis, con un peinado que recordaba al de Betty Boo o a una señorita de los años 60. En definitiva, que cuando le cortamos el pelo, lo vemos tan cambiado que, a la próxima, le pillamos por banda y tijera en mano, se lo hacemos en casa, a ver cómo resulta. Al fin y al cabo, cada día desde que se lo cortaron que le veo una patilla mal desfilada o un cuerno mal saliente por la nueca y le voy dando tijeretazos...
¿Y vosotros? ¿Lleváis a la pelu a los peques o les cortáis en casa? ¿Contentos con el resultado final?
La primera vez, decidí llevarle a mi peluquera, bueno, a la que fui para mi boda y he ido de vez en cuando, que quizás es con la que tenemos más confianza. Pero cometimos el error de que Papá Rosquillas se cortase los cuatro pelos el mismo día y Rosquis se comenzó a impacientar. No quería estar en la trona con los juguetes que le pusimos a disposición, sino que quería ir arriba y abajo por el local y no podía ser. Así que la buena mujer hizo lo que pudo, vistas las circunstancias y las prisas, y le dejó con cara de chico, eso sí, como vereis en la foto. ¡Y además, no nos cobró nada!. Pero a mí no me parecía él. Nos fuimos de vacaciones y por más que le miraba me costaba encontrar a Rosquis en ese nuevo look, parecía que con el pelo corto se le hubiese ido una parte de sus señas de identidad. Su fuerza no la había perdido, cuál Sansón, ¡eso no!
La segunda vez fue el fin de semana pasado. Su padre conocía una pelu de la zona, donde se había cortado el pelo por cercanía y comodidad, y decidimos llevarle. Por suerte, daban horas y eso nos garantizaría, si eran cumplidores y organizados, no tenernos que esperar. Además, iba a ser una tarde en exclusiva para él, ninguno de nosotros aprovecharía para "arreglarse". Comenzamos un poquito revueltos, pues primero no se quería dejar mojar el pelo con el spray, pero al ver que la "xampoonier" se lo hacía a su padre, decidió acceder. Le puso peinador a su padre, a Rosquis una toalla, puesto que no se dejó más y se sentó encima de su padre. Con tranquilidad, cumplió con todo, si le decían, baja la cabeza, la bajaba o que la girase, pues lo hacía. Cuando le propusieron cerrar los ojos, para que no le entrasen los pequeños pelitos, él no lo vio tan claro, aunque finalmente, lo hizo. Así que en 15 minutos estuvo listo. El peluquero se maravillaba de lo bien que se había portado y alababa su belleza, ¿esta gente son todos así?.
En casa, le lavamos el pelo, como siempre hacemos en el baño y, al secarle emergió "Closquis", el nuevo Rosquis, con un peinado que recordaba al de Betty Boo o a una señorita de los años 60. En definitiva, que cuando le cortamos el pelo, lo vemos tan cambiado que, a la próxima, le pillamos por banda y tijera en mano, se lo hacemos en casa, a ver cómo resulta. Al fin y al cabo, cada día desde que se lo cortaron que le veo una patilla mal desfilada o un cuerno mal saliente por la nueca y le voy dando tijeretazos...
¿Y vosotros? ¿Lleváis a la pelu a los peques o les cortáis en casa? ¿Contentos con el resultado final?
miércoles, 4 de mayo de 2016
SISTERHOOD OF THE WORLD BLOGGERS
Siempre da alegría recibir nominaciones a premios por parte de otras mamis bloggers. Por ello, en agradecimiento y para que me conozcáis mejor, escribo este post. Si hace unos días era el Infinity Dreams Awards ,en esta ocasión se trata del Sisterhood of the World Bloggers, que vendría a ser algo así como "Hermandad de Bloggers por el Mundo", lo que me parece muy bonito que te recuerden que formas parte de una comunidad y que tu blog es querido y bien valorado. Recibo nominación por parte de tres bloggers a las que sigo y me gusta su manera de escribir y de ver la vida y la maternidad, Paqui, de Mami esto está chuli, Montse, de Mi mamá me mima y me cocina y María José, de Con Ñ de Cariño. No os perdáis sus secciones de recetas, trucos y consejos maternales, seguro que os van a interesar.
El procedimiento es el siguiente:
-Poner el logo del premio (¡hecho!)
-Agradecer a quien te nomina (¡hecho!)
-Responder a las 10 preguntas que te hayan propuesto.
-Crear 10 preguntas.
-Nominar a 10 blogs.
Tengo 20 preguntas que contestar, así que me pongo manos a la obra.
A continuación, voy a contestar las 10 preguntas de Paqui, de Mami esto está chuli.
¿Cuál es tu mejor momento del día?
¿Que ciudad te encantaría visitar?
¿Cual es tu mejor cualidad como madre?
Peor consejo que te han dado nunca
Libro que menos te ha gustado
Un secreto
¿Que te gustaría comprarte y nunca te has atrevido?
Si volvieras atrás, ¿volverías a abrir el blog?
Alimento favorito
Si tuvieras que resumir tu maternidad en una frase. ¿Cuál sería? - See more at: http://www.mamiestoestachuli.es/#sthash.96iDdArk.dpuf
¿Que ciudad te encantaría visitar?
¿Cual es tu mejor cualidad como madre?
Peor consejo que te han dado nunca
Libro que menos te ha gustado
Un secreto
¿Que te gustaría comprarte y nunca te has atrevido?
Si volvieras atrás, ¿volverías a abrir el blog?
Alimento favorito
Si tuvieras que resumir tu maternidad en una frase. ¿Cuál sería? - See more at: http://www.mamiestoestachuli.es/#sthash.96iDdArk.dpuf
¿Cuál es tu mejor momento del día? Creo que ya lo expliqué en el post de #ElTemaDeLaSemana: "Mi momento favorito del día", y me es muy difícil escoger entre uno de ambos momentos.
¿Que ciudad te encantaría visitar? Voy a decir una que no haya estado aún, me encantaría ir a Londres, pues es la típica ciudad que todos han ido y recomiendan, además el idioma no sería problema, me ayudaría a quitar óxido a mi inglés. Y más lejanas, serían Nueva York o Kyoto.
¿Cuál es tu mejor cualidad como madre? Uy, qué complicado. Quizás intentar superar el día a día lo mejor que puedo, con constancia.
Peor consejo que te han dado nunca: Son algo tópicos, que no cogiera al peque que se malacostumbra o que no lo metiera a dormir con nosotros, que nunca saldría de nuestra cama. Dos sentires completamente falsos. A las pruebas me remito.
Libro que menos te ha gustado: No suelo dejar los libros por terminar, aunque no me gusten del todo, y en general, suelo tener bastante ojo a la hora de escoger literatura.
Un secreto: Si es secreto, quizás no debería confesarlo, ¿no? No sé planchar y nunca lo hago, así que intento estirar al máximo la ropa al colgarla, dejarla al vapor del baño o elegir prendas que no necesiten plancha. Lo sé, es de muy malamadre.
¿Qué te gustaría comprarte y nunca te has atrevido? Unos tacones de aguja, los encuentro sexys, pero para ver puestos a otras, soy un "pato mareado" y no podría caminar ni 10 minutos con ellos puestos.
Si volvieras atrás, ¿volverías a abrir el blog? Sí, por eso lo reabrí hace pocos meses, porque, en el fondo, lo echaba de menos.
Alimento favorito: Las patatas fritas y el jamón serrano, me encanta el salado.
Si tuvieras que resumir tu maternidad en una frase. ¿Cuál sería?: Mi maternidad es una locura, pero encuentro un orden y un sentido, dentro del caos diario porque amo a mi Rosquis.
¿Cuál es tu mejor momento del día?
¿Que ciudad te encantaría visitar?
¿Cual es tu mejor cualidad como madre?
Peor consejo que te han dado nunca
Libro que menos te ha gustado
Un secreto
¿Que te gustaría comprarte y nunca te has atrevido?
Si volvieras atrás, ¿volverías a abrir el blog?
Alimento favorito
Si tuvieras que resumir tu maternidad en una frase. ¿Cuál sería? - See more at: http://www.mamiestoestachuli.es/#sthash.96iDdArk.dpuf
¿Que ciudad te encantaría visitar?
¿Cual es tu mejor cualidad como madre?
Peor consejo que te han dado nunca
Libro que menos te ha gustado
Un secreto
¿Que te gustaría comprarte y nunca te has atrevido?
Si volvieras atrás, ¿volverías a abrir el blog?
Alimento favorito
Si tuvieras que resumir tu maternidad en una frase. ¿Cuál sería? - See more at: http://www.mamiestoestachuli.es/#sthash.96iDdArk.dpuf
Aquí voy a responder las preguntas de Montse, de Mi mamá me mima y me cocina.
-¿Cuál es tu libro favorito? Complicado elegir sólo uno, voy a elegir los dos que os conté en Madresfera books.
-¿Que has aprendido siendo blogger? A intentar no meterme en batallas dialécticas en RRSS que no lleven a ningún lado y muchos trucos de otras mamás.
-¿Cuál es tu plato preferido? Cualquier plato de pasta y una tortilla (de lo que sea) y ya estoy contenta.
-¿Playa o Montaña? Adoro ver el mar, pero me relaja más la montaña, es donde me siento más en contacto con la naturaleza.
-¿Cuál es tu sueño pendiente de cumplir? Hacer un viaje a algún lugar remoto e ir a los Festivales de Cannes y a los Oscars de Hollywood al menos una vez en la vida.
-¿Qué cambiarías del mundo? Muchas cosas: El egoismo, la insolidaridad, la mala distribución de la riqueza, el sufrimiento de los más débiles, etc.
-Confiesa dos manías tuyas: Lavarme las manos infinidad de veces al día y llevar siempre los bolsos cargados de cosas hasta los topes.
-¿Con qué película has llorado más?: De las actuales, con una de animación de Ghibli "El cuento de la princesa Kaguya", lloré a mares en muchos momentos.
-¿Cuál es tu estilo de música favorito? El pop-rock británico o americano.
-Que le dirías a un blogger que empezara: Que tenga paciencia y constancia, que si ama escribir no lo haga por los demás, sino por él/ella mismo, porque un blog es el rincón de cada uno abierto al mundo.
Por último, voy a contestar las 10 cuestiones de María José, de Con Ñ de Cariño.
-¿Por qué decidiste tener un blog de maternidad? Los 6 primeros meses no tenía tiempo de nada e iba agobiadísima, al séptimo mes empecé a ver en twitter que había una comunidad de madres que se relacionaben entre ellas hablando de sus peques y dos meses más tarde decidí que, aparte de la cuenta de twitter quería contar mis experiencias en el blog.
-¿Qué es lo que más te gusta de tus hijos y lo que menos? Lo que más la carita que pone al despertar, sus caricias o besitos inesperados...Y lo que menos, sus rabietas y llantos en alto decibelio, siempre ha sido un niño bastante llorón y gritón.
-¿Crees que algún día llegaremos a la esperada conciliación? Pues no lo sé, ahora hay más consciencia de que la conciliación es más necesaria que nunca y madres y padres están más implicados en luchar por ella. Espero que la puedan alcanzar al menos las generaciones que nos suceden.
-¿Eres un padre o madre sobreprotector? ¿Piensas que eso es bueno para la educación de tus hijos? No quiero serlo, pero en algún momento o situación tiendo a ello, quizás porque me educaron en un ambiente sobreprotegido también o bien por algunos miedos de primeriza, pero creo que cada vez lo soy un poco menos que de bebé. Yo pienso que no es bueno, que hemos de dejar que sean libres, que puedan hacer, crear, en defnitiva, dejarles ser.
-Si tus hijos van al cole ¿Cómo los llevas?
Vamos andando porque está cerquita de casa.
-¿Qué opinas de los deberes escolares? El mío es peque y aún no tiene deberes, pero sí que es cierto que sobrecargar a los niños de deberes les resta tiempo para lo que es más importante en la infancia, que es jugar y experimentar.
-¿Fomentas la lectura en casa, das ejemplo? Siempre busco algún ratito al día para leer con Rosquis, tenemos una buena biblio y no le impongo lo que hemos de leer, sino que le dejo que lo escoja él.
-¿Hacéis excursiones? ¿a que sitios soléis ir? No hacemos muchas excursiones, la verdad, somos bastante urbanitas. En vacaciones sí que hacemos excursiones a otros lugares cercanos a donde nos alojemos. Si hacemos excursiones en invierno es para ir a otro parque o a pasar el día fuera, pero no en "plan excursionista", sino de estar por casa (risas).
-¿Os gustaría ser familia numerosa? ¿Por qué? No, tenemos bastante claro que Rosquis va a ser hijo único. Y eso que admiro a las familias numerosas, de hecho, una amiga de la infancia eran 10 hermanos y adoraba ir invitada a comer a su casa, pero con la práctica no va con nosotros (risas).
-¿Qué pensáis de los sitios que prohíben la entrada de niños? Me quedo un poquito en shock, la verdad. Seguramente no se dan cuenta que ellos fueron niños y que son el activo del futuro. En mi caso, buscando lugares para vacaciones, me encontré con un hotel que prohibían la entrada a niños menores de 12 años y aún flipé más con la restricción. No comprendo tanta exclusividad, igual puede molestar un niño que una persona mayor que no sea educada ni respetuosa en un restaurante o en un hotel, asi que estoy bastante en desacuerdo.
Mis 10 preguntas son las siguientes:
Por último, voy a contestar las 10 cuestiones de María José, de Con Ñ de Cariño.
-¿Por qué decidiste tener un blog de maternidad? Los 6 primeros meses no tenía tiempo de nada e iba agobiadísima, al séptimo mes empecé a ver en twitter que había una comunidad de madres que se relacionaben entre ellas hablando de sus peques y dos meses más tarde decidí que, aparte de la cuenta de twitter quería contar mis experiencias en el blog.
-¿Qué es lo que más te gusta de tus hijos y lo que menos? Lo que más la carita que pone al despertar, sus caricias o besitos inesperados...Y lo que menos, sus rabietas y llantos en alto decibelio, siempre ha sido un niño bastante llorón y gritón.
-¿Crees que algún día llegaremos a la esperada conciliación? Pues no lo sé, ahora hay más consciencia de que la conciliación es más necesaria que nunca y madres y padres están más implicados en luchar por ella. Espero que la puedan alcanzar al menos las generaciones que nos suceden.
-¿Eres un padre o madre sobreprotector? ¿Piensas que eso es bueno para la educación de tus hijos? No quiero serlo, pero en algún momento o situación tiendo a ello, quizás porque me educaron en un ambiente sobreprotegido también o bien por algunos miedos de primeriza, pero creo que cada vez lo soy un poco menos que de bebé. Yo pienso que no es bueno, que hemos de dejar que sean libres, que puedan hacer, crear, en defnitiva, dejarles ser.
-Si tus hijos van al cole ¿Cómo los llevas?
Vamos andando porque está cerquita de casa.
-¿Qué opinas de los deberes escolares? El mío es peque y aún no tiene deberes, pero sí que es cierto que sobrecargar a los niños de deberes les resta tiempo para lo que es más importante en la infancia, que es jugar y experimentar.
-¿Fomentas la lectura en casa, das ejemplo? Siempre busco algún ratito al día para leer con Rosquis, tenemos una buena biblio y no le impongo lo que hemos de leer, sino que le dejo que lo escoja él.
-¿Hacéis excursiones? ¿a que sitios soléis ir? No hacemos muchas excursiones, la verdad, somos bastante urbanitas. En vacaciones sí que hacemos excursiones a otros lugares cercanos a donde nos alojemos. Si hacemos excursiones en invierno es para ir a otro parque o a pasar el día fuera, pero no en "plan excursionista", sino de estar por casa (risas).
-¿Os gustaría ser familia numerosa? ¿Por qué? No, tenemos bastante claro que Rosquis va a ser hijo único. Y eso que admiro a las familias numerosas, de hecho, una amiga de la infancia eran 10 hermanos y adoraba ir invitada a comer a su casa, pero con la práctica no va con nosotros (risas).
-¿Qué pensáis de los sitios que prohíben la entrada de niños? Me quedo un poquito en shock, la verdad. Seguramente no se dan cuenta que ellos fueron niños y que son el activo del futuro. En mi caso, buscando lugares para vacaciones, me encontré con un hotel que prohibían la entrada a niños menores de 12 años y aún flipé más con la restricción. No comprendo tanta exclusividad, igual puede molestar un niño que una persona mayor que no sea educada ni respetuosa en un restaurante o en un hotel, asi que estoy bastante en desacuerdo.
Mis 10 preguntas son las siguientes:
-¿Qué es lo primero qué haces al levantarte por las mañanas?
-¿Qué es lo último que haces antes de acostarte?
-¿Dulce o salado?
-¿En qué te ha cambiado ser madre/padre?
-¿Qué aficiones cultivas?
-¿Prefieres salir en pareja, en familia o en solitario?
-¿Cuál crees que es la mayor cualidad y el mayor defecto de un blogger?
-¿Qué te enamora de tu familia?
-¿Qué te irrita de tu familia?
-¿Te consideras una persona organizada? ¿En qué sentido?
Voy a nominar a 10 blogs (que no sé si ya han estado nominados o no):
Os ha tocado: ¿Aceptáis la nominación y hacer el post? ¿Espero que sí!
martes, 3 de mayo de 2016
SORTEO CON TXELFACTORY
Bambas y espardenyes son sinónimo de buen tiempo, de aire libre, de ocio y de vacaciones (cercanas o celebradas). En Casa Rosquillas nos gusta sobre todo la comodidad y libertad que nos da este calzado. No nos estusiaman los zapatos de mucho arreglo y yo, por ejemplo, nunca he tolerado bien los tacones. Por eso, cuando vi el trabajo que hacía Txelfactory en bambas y espadenyes, me enamoré de inmediato.
Si no conocéis a Cheli, la artista que está detrás, ya estáis tardando, pues es una ilustradora sevillana afincada en Mallorca con unos diseños personalizadas a gusto de cada uno, con una creatividad y una imaginación desbordantes, sólo hay que ver el bonito trabajo que hizo en las cabeceras y avatares de AnimalitosTuyyo (y en muchos otros blogs) para comprobar cómo sabe captar el espíritu de cada uno y plasmarlo en un trabajo dinámico, fresco y divertido. Mirad su página Txelfactory y veréis un abanico de ilustraciones en sus más variadas formas, que seguro que os cautivarán.
Para este #SorteoAnimalitostuyyo, Cheli nos ofrece la posibilidad de elegir entre bambas o espardenyes y personalizarlas a vuestros gusto para vosotros o vuestros peques. ¿Qué os parece?
Condiciones del Sorteo:
-Seguir Facebook Txelfactory o Twitter Txelfactory
-Seguir Facebook Animalitostuyyo (opcional, pero tendréis participación extra).
-Compartir publicamente el sorteo en alguna de vuestras RRSS.
-Dejar un comentario en esta entrada diciendo qué os gustaría que os diseñara y para quién y dejar vuestro e-mail.
Sorteo para Península y Baleares, válido desde hoy martes 3 de mayo hasta el próximo martes 17 de mayo. Anunicaré ganador en RRSS y también me pondré en contacto con el ganador vía e-mail y tendrá 3 días para reclamar su premio y mandarme datos, sino, lo volvería a sortear de nuevo. ¡¡¡Mucha suerte!!!
Si no conocéis a Cheli, la artista que está detrás, ya estáis tardando, pues es una ilustradora sevillana afincada en Mallorca con unos diseños personalizadas a gusto de cada uno, con una creatividad y una imaginación desbordantes, sólo hay que ver el bonito trabajo que hizo en las cabeceras y avatares de AnimalitosTuyyo (y en muchos otros blogs) para comprobar cómo sabe captar el espíritu de cada uno y plasmarlo en un trabajo dinámico, fresco y divertido. Mirad su página Txelfactory y veréis un abanico de ilustraciones en sus más variadas formas, que seguro que os cautivarán.
Para este #SorteoAnimalitostuyyo, Cheli nos ofrece la posibilidad de elegir entre bambas o espardenyes y personalizarlas a vuestros gusto para vosotros o vuestros peques. ¿Qué os parece?
Condiciones del Sorteo:
-Seguir Facebook Txelfactory o Twitter Txelfactory
-Seguir Facebook Animalitostuyyo (opcional, pero tendréis participación extra).
-Compartir publicamente el sorteo en alguna de vuestras RRSS.
-Dejar un comentario en esta entrada diciendo qué os gustaría que os diseñara y para quién y dejar vuestro e-mail.
Sorteo para Península y Baleares, válido desde hoy martes 3 de mayo hasta el próximo martes 17 de mayo. Anunicaré ganador en RRSS y también me pondré en contacto con el ganador vía e-mail y tendrá 3 días para reclamar su premio y mandarme datos, sino, lo volvería a sortear de nuevo. ¡¡¡Mucha suerte!!!
lunes, 2 de mayo de 2016
DÍA DE LA MADRE EN CASA ROSQUILLAS
Ayer celebramos el Día de la Madre y, como manda la tradición, pasamos el día la Familia Rosquillas haciendo algún plan que nos gustara a todos, ya que es un día muy especial, no sólo por su significado, sino porque 3 años atrás me llevé una alegría tremenda: El 1 de mayo me hice mi primer y único test de embarazo y supe, con certeza, que estaba esperando a Rosquis. Ayer empecé el día con sorpresa inesperada, pero muy distinta: Rosquis y Papá Rosquillas me hicieron un regalito: Unos bonitos pendientes de ámbar.
Tras desayunar cogimos el coche y nos fuimos a pasar el día fuera (bueno, en realidad fue sólo la mañana y el mediodía). Estuvimos en el parc Francesc Macià, de Malgrat de Mar, un bonito y enorme parque en el Maresme Nord, que destaca ya por su entrada como si un castillo una vez dentro y ya en el interior por estar salpicado por originales esculturas de flores, setas, una casita de chocolate, croissants, tartas, lápices, gomas de borrar, etc Además de los tradicionales columpios, toboganes, caballitos, etc. Se divide en varias área de juego y hay zona de recreo y de picnic. Como era domingo estaba bastante lleno de familias. Rosquis se lo pasó entupendamente allí, era la segunda vez que lo vsisitaba, pero la primera había muy poca gente y no tenemos tan buen recuerdo.
A la hora de comer, nos decidimos por un restaurante de la zona (otro día nos llevamos picnic seguro, ahora que hace buen tiempo). Acabamos en una masia, donde había varios menús festivos. Para Rosquis fuimos sobre seguro con el plato de macarrones a la boloñesa, que se comió con gran apetito y aún tuvo ganas de comer un poco de nuestros segundos y de coger alguna cucharada de la tarta de tiramisú de postre. Fue una comida agradable y sin incidentes destacados. De las veces que estuvo más contento y tranquilo en un restaurante.
Pero al coger el coche, al poco de ir montado se quedó dormido y pensamos: "¡Ya estamos salvados de camino!". Nada más lejos de la realidad, al cabo de un rato se despertó y de muy mal humor, con una rabieta tremenda, de lloros y gritos. Nada le calmaba: Ni beber agua, ni el cantajuegos, ni los juguetes del coche. Así que decidimos poner rumbo a casa antes de lo previsto y pasar ya la tarde en Barcelona. Fin de fiesta un poco abrupto, debido a las circunstancias o a nuestra mala gestión de la situación en ese momento.
Y de nuevo, pude percatarme que, a veces, los recursos como padres no son ilimitados y que la paciencia se nos se termina incluso antes que al resto de los mortales, aunque hagamos acopio de ella. No obstante, cuando pienso en la jornada de ayer, intento quedarme con lo bueno, que es lo que ha de nutrir siempre los recuerdos de las fechas especiales.
¿Cómo fue vuestro Día de la Madre? ¿Alguna anécdota o contratiempo?
Tras desayunar cogimos el coche y nos fuimos a pasar el día fuera (bueno, en realidad fue sólo la mañana y el mediodía). Estuvimos en el parc Francesc Macià, de Malgrat de Mar, un bonito y enorme parque en el Maresme Nord, que destaca ya por su entrada como si un castillo una vez dentro y ya en el interior por estar salpicado por originales esculturas de flores, setas, una casita de chocolate, croissants, tartas, lápices, gomas de borrar, etc Además de los tradicionales columpios, toboganes, caballitos, etc. Se divide en varias área de juego y hay zona de recreo y de picnic. Como era domingo estaba bastante lleno de familias. Rosquis se lo pasó entupendamente allí, era la segunda vez que lo vsisitaba, pero la primera había muy poca gente y no tenemos tan buen recuerdo.
A la hora de comer, nos decidimos por un restaurante de la zona (otro día nos llevamos picnic seguro, ahora que hace buen tiempo). Acabamos en una masia, donde había varios menús festivos. Para Rosquis fuimos sobre seguro con el plato de macarrones a la boloñesa, que se comió con gran apetito y aún tuvo ganas de comer un poco de nuestros segundos y de coger alguna cucharada de la tarta de tiramisú de postre. Fue una comida agradable y sin incidentes destacados. De las veces que estuvo más contento y tranquilo en un restaurante.
Pero al coger el coche, al poco de ir montado se quedó dormido y pensamos: "¡Ya estamos salvados de camino!". Nada más lejos de la realidad, al cabo de un rato se despertó y de muy mal humor, con una rabieta tremenda, de lloros y gritos. Nada le calmaba: Ni beber agua, ni el cantajuegos, ni los juguetes del coche. Así que decidimos poner rumbo a casa antes de lo previsto y pasar ya la tarde en Barcelona. Fin de fiesta un poco abrupto, debido a las circunstancias o a nuestra mala gestión de la situación en ese momento.
Y de nuevo, pude percatarme que, a veces, los recursos como padres no son ilimitados y que la paciencia se nos se termina incluso antes que al resto de los mortales, aunque hagamos acopio de ella. No obstante, cuando pienso en la jornada de ayer, intento quedarme con lo bueno, que es lo que ha de nutrir siempre los recuerdos de las fechas especiales.
¿Cómo fue vuestro Día de la Madre? ¿Alguna anécdota o contratiempo?
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