viernes, 29 de abril de 2016
MI HIJO PEGA Y NO SABE CONTROLAR SUS EMOCIONES
Mi hijo es de los aquellos que pegan, dan estirones de pelo o araña en el parque o cuando está con otros niños. No siempre, pero a veces, lo hace. Y me sabe mal. No soy una madre de esas que se despreocupa, sino de las que pasa vergüenza, le riñe, le dice que está mal, que no ha de hacerlo ni ha de hacer llorar a otros nenes. Pero, a pesar de eso, ha reincidido en su comportamiento.
Tiene 27 meses y está en plena fase de las rabietas, de saberse autorregular, de controlar sus emociones. Es un proceso, es complicado, pues aún no habla fluido, aunque sí dice bastantes palabras y lo entiende todo. No me gusta que su tiempo de ocio sea un tiempo de vigilancia y de privaciones, pero hay que estar encima de él porque aún no sabe que cuando quiere un juguete de otro o no desea compartir uno propio no debe agredir al niño que tiene delante. No lo sabe y reincide.
¿Y porqué cuento esto? Pues porque últimente he vivido dos situaciones que quería compartir.
El otro día estitó dos veces del pelo a su amiguito del parque, un peque de 26 meses con el que juega día sí y otro también y siempre se llevan bien (era la primera vez que pasaba). Y su abuelo, que es el que le acompaña, cogió a su nieto y se le llevó del parque, diciendo: "Rosquis, te vas a quedar solo, no vas a tener amigos". Y a mí me dolió en el alma en ese momento, al menos, tal y como lo expresó.
Hoy me ha pasado virtualmente. Una compañera blogger me ha preguntado si iba a llevar a Rosquis a una charla y me ha recordado que en un evento anterior se dedicó a "cascar" a varios niños, por lo que varias familias se quejaron. Mi reacción ha sido no llevarlo, pues aunque sea un evento kidfriendly, soy de naturaleza pacífica y no me gusta crear mal ambiente y más, si no puedo ocuparme de él y estar en la charla, tampoco puedo consentir tampoco que vuelva a hacerlo. Así que, por respeto a los demás niños, no lo voy a llevar. Pero es una pena. Que no pueda ir y no se pueda relacionar, que nos pase esto y que continue estirando pelos o arañando, cuando en casa nunca ve ningún comportamiento violento ni nada por el estilo en Casa Rosquillas. Y como me duele, me tenía que desahogar y os lo he contado en este post exprés y para nada programado.
¿Qué me aconsejáis hacer con Rosquis, aparte de hacer lo que hacemos, vigilarle y reñirle cuando lo hace?
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Lo único que puedo decir es paciencia, paciencia y paciencia. Ya estáis haciendo lo correcto en estos casos (al menos según mi opinión) así que lo único que queda esperar es que pase esta fase. Con Bamba 1 no la pasamos, siempre ha sido un niño que evita los conflictos, pero Bamba 2 empieza ahora porque en su clase son unos terremotos y están todo el día con la mano levantada y la boca preparada.; eso sí, de momento solo se lo hace a la familia, sobre todo a mí y a Bamba 1, el tío sabe quedar bien fuera de casa... Hay un libro que recomiendan para estas edades que se llama Las emociones de Nacho, quizás os pueda ayudar al menos para que pueda identificar (muy básicamente que es lo que le toca por edad) el sentimiento que le lleva a pegar.
ResponderEliminarMamá Bamba
Muchas gracias por el consejo y por la recomendación de lectura,lo buscaré! Yo también pienso que es una etapa y que cuando hable y se exprese verbalmente cambiará. Besitos!
EliminarTiene que ser complicado, él Cucu coge rabietas, las típicas pero de momento no ha pegado, claro que es más pequeño, imagino que como dice Mamá Bamba tendrás que tener paciencia...Los adultos también nos tenemos que hacer cargo de que son niños y aunque a nadie le gusta que peguen a su hijo no creo que sea bueno decirle que se va a quedar solo y demonizarlo. Mucho ánimo que seguro que es una etapa y pasa pronto! Un abrazo!
ResponderEliminarEso creo yo,que aunque no es agradable que peguen a tu peque uno se ha de hacer cargo que aún son niños pequeños y que no actúan con maldad y ser más comprensivo porque tampoco nos gusta ver cómo Rosquis les pega,sino al contrario. Besitos!
EliminarYo no soy una experta, asi que más que un consejo a seguir, puedo explicarte mi propia experiencia. Como bien sabes si hay algo que me encanta son las emociones..... La ira y la rabia, la fustración, son quizas de las emociones que los niños que no las identifican ni las enrienden pueden reaccionar con rabietas, incluso pegar. soy, todo y que yo he reñido a mis hijas en muchas ocasiones, partidaria de no reñir en estos casos porque ni él sabe lo que le psa y lo que siente. Entre los 2 y 4 años es normal que en los niños aparezca alguna forma de agresividad pq tienen una baja tolerancia a la fustracion. Lloran, pegan, muerden..... Y mas pq en esa edad es cuando empiezan a i teravtuar socialmente con sus semejantes. Pienso que reñirle onreaccionar los padres enfadados y con cierta agresividad (los niños ven eso cuando los reñimos) no es lo mas aconsejado. No hay que ser y quedarse indiferente como padres ante la conducta del niño; hay que intervenir y reprenderle de su actitud, hacerle entender que no se hace y hacerle que pida perdón. Hay que ayudarlo a expresar lo que siente en ese momento con palabras que es la base de la educacion en las emociones; y enseñarle que se puede reaccionar de otra manera ante ese sentimiento o cuando algo le sale mal. Es importante que si su actuacion es esa al principio hay que premiar las buenas reacciones en sus relaciones sociales. Y enseñarle a ser paciente y a respirar y calmarse. Piensa que despues de los 4 años posiblemente se le pasara.
ResponderEliminarEspero te sirva de ayuda
Eso es lo que hacemos cuando lo hace,decirle que no está bien, que no ha de hacer llorar a otros niños para que intente comprender,en la medida de sus posibilidades,que esa no es una conducta para nada aceptable. Por otra parte, no hemos de olvidar que es son niños pequeños y que ni a nosotros nos gusta que peguen ni a otros padres que a su peque le peguen, pero hay que ser comprensivos y no olvidar nunca que no hay maldad en su conducta. Besitos!
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