No hay muchas semanas que coincidan dos estrenos familiares muy distintos, pero a la vez, recomendables para llevar al cine a los peques por su calidad. Es el caso de El libro de la selva y El niño y la bestia. Recogemos las críticas a continuación para que tengáis una idea de lo que nos vamos a encontrar antes de pisar la sala con los más peques.
EL NIÑO Y LA BESTIA
Mamoru Oshoda (Summer Wars, 2009) escribe y dirige El chico y la
Bestia, un anime de ambientación fantástica que divide su tiempo entre
dos protagonistas y sus respectivos mundos. El primero es un chico
humano, tokiota concretamente, que se ha escapado de casa con nueve años
tras la pérdida de su padre y cuyo nombre nunca llegaremos a saber,
quedándonos con su apodo Kyuta. El segundo es el indisciplinado y
salvaje campeón del mundo de las bestias Kumatetsu. En una visita a
nuestro mundo ambos se encuentran y Kumatetsu le ofrece a Kyuta la
posibilidad de ser su aprendiz.
Desde el punto de vista del chico descubriremos un mundo habitado por
animales antropomorfos y similar al Japón feudal. Dejamos atrás las
apagadas calles de Tokyo para adentrarnos en un mundo cargado de vida y
vibrante colorido. El gran trabajo realizado en la animación queda, sin
embargo, deslucido por un desarrollo de personajes y conflictos a los
que les falta ambición. A estas alturas, el hecho de que el público
objetivo de una cinta sea mayoritariamente infantil no es excusa para
dejar fuera una historia compleja, con matices y subtextos.
En El Niño y la Bestia sin embargo, la falta de una figura paternal
de uno y el combate por la supremacía del otro no dejan de ser recursos
de manual a los que podría haberse sacado mucho más jugo. Resulta
extraño, por otra parte, todo lo concerniente al mundo humano una vez
pasan los años y un Kiuta casi adulto busca sus orígenes al quedar claro
que nunca forma parte al cien por ciento del mundo de las bestias. Esto
da pie, eso sí, a una secuencia impresionante con las calles de Tokyo
convertidas en una suerte de océano espiritual.
El Chico y la Bestia es por tanto un entretenimiento recomendable
sobre todo para ver con niños, aunque su mensaje y desarrollo dejará más
bien indiferente a los adultos que les acompañen.
Edad recomendada: No hay límite de edad.
EL LIBRO DE LA SELVA
Los tiempos cambian. Y con ello, también nuestro modo de ver las
cosas. Esa es la principal razón de ser de las nuevas adaptaciones ya
sea sobre films, libros o comics. Y el hecho de que ahora tengamos unos
efectos digitales de mayor nivel, hace posible contar historias que de
otra forma no hubiera sido posible. Pero el hartazgo de reutilización de
material previo puede engendrar recelos al espectador de forma fácil.
¿Otra vez El libro de la selva?
Si, otra vez. No en vano, con Cenicienta 2015 Disney demostró que la
readaptación de sus clásicos en pelicula de acción real puede crear
verdaderas joyas. De hecho, lo que hizo Kenneth Branagh con el personaje
del zapatito de cristal para mi supera incluso el clásico animado. Y es
que aún con sus guiños complices al film de los años 50, la Cenicienta
del director de Thor le da otro aire renovado al film: Uno en que se
readapta la historia a las nuevas formas de ver el mundo actualmente
pero sin el postmodernismo de hoy que a veces puede resultar muy
cargante.
Aquí la estrategia es la misma. Jon Favreau indaga en el
subconsciente y el trasfondo de Rudyard Kipling más que el de el film
animado aunque con sus diferencias. La primera que por fortuna Jon
Favreau lleva la historia a su terreno y confirma que aunque con unas
líneas de producción establecidas por el estudio, estos films pueden ser
“hijos” de sus directores. La segunda, que quizá debido al carácter mas
icónico de su universo musical, el film cae más en el remix que en el
anteriormente citado. Por suerte, a excepción de un momento que suena
postizo, esto encaja en el conjunto. También que si en la Cenicienta
2015 era cine de antaño como los romances victorianos con un toque
british, El Libro de la Selva 2016 es una aventura retro que nos
recuerda al cine de aventuras de los años 70 adaptado para todos los
públicos. Y por último, el transfondo holístico algo tan poco habitual
en el cine que por fortuna ambas recuperan.
No en vano, creo que aparte de su espectáculo visual foto-realista
impresionante esta es la gran baza de la nueva película del director de
Iron Man. Porque Favreau saca a la palestra las metáforas mesiánicas con
la ingenuidad y la habilidad que marca la mayor parte de nuestro legado
espiritual y eso tiene mucho mérito. Así pues, sin descubrir nada, El
Libro de la Selva (aparte de un divertimiento para toda la familia con
alguna pequeña dosis de oscuridad) es un luminoso fresco sobre la
tradición, la ambición o la generosidad bajo la atenta mirada de los
dioses caídos.
Edad recomendada: A partir de 7 años por sus partes más "oscuras".
¿Qué os parecen las dos propuestas? ¿Hay ganas de llevar a los peques al cine o lo habéis hecho ya?
Pues la primera no la conocía, pero tiene buena pinta y la segunda cuando vi el trailer pensé, ¿de verdad otro remake? pero bueno, igual habría que darle una oportunidad, eso si en DVD.
ResponderEliminarSí, la japonesa la hicieron en Sitges y quedó todo el mundo fascinado. El libro de la selva creo que es un remake bien espectacular y por eso, ha tenido sentido hacerlo de nuevo. Besitos!
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