-Sostenes de lactancia: Yo no tengo ropa específica de lactancia, sólo alguno sostenes, que diferencio entre los de llevar por casa y los de salir a la calle (los de casa son los que se me han ido quedando viejecitos, tras tantas lavadas), también tenía una camiseta de lactancia que me regaló Almirón. El resto de ropa es ropa normal, pero más holgada o con más escote para que pueda dar teta con más facilidad.
-Discos de lactancia: Imprescindibles durante los primeros meses, cuando la producción de leche no está regulada, para evitar escapes y manchas en la ropa.
-Cojín: En mi caso son almohadones largos de cama y no cojines específicos para la lactancia (que cuestan mucho dinero y no tengo claro que sean súper útiles, pues estuve probando uno hace tiempo en una tienda y a mí no me convenció). Sirven para aguantar el peso del bebé y, en el postparto, son aliados para que no me diera patadas en el vientre.
-Rincón de lactancia: Si estás en casa, buscar un lugar tranquilo y cómodo, como un sofá o sillón en la habitación propia o del bebé y si estás fuera, en casa de la familia, que te dejen un rinconcito de relax, fuera de distracciones y de miradas. Si estás en la calle, pues también buscar un lugar retirado, como un banco del parque no demasiado visible ni de paso, o dentro del coche, si hace frío o no tienes otro lugar.
-Sacaleches: En mi caso no ha sido necesario, pero sí es imprescindible cuando trabajas fuera de casa o vas a estar muchas horas lejos del bebé, para ir aliviando los pechos y/o preparando el banco de leche para la vuelta.-Purelán y/o suero fisiológico: La crema de lanolina es esencial para el cuidado del pezón y evitar la aparición de grietas, el suero es muy necesario para curar heridas producidas por un mal agarre o por mordiscos.
-Vitaminas y, especialmente, yodo: El yodo es el mineral esencial que no debe faltarle a toda mujer lactante, o sino, un complejo vitamínico no va mal en situaciones de extremo cansancio, desgaste físico o anemia en el posparto.
-Dieta sana, equilibrada y variada: No hace falta decir que no hay que comer ni por dos ni en exceso, pero sí llevar una alimentación de lo más completa, incluso comiendo menos cantidad pero varias veces al día, aparte de las comidas principales, ir haciendo algunos tentempiés.
-Información sobre lactancia: Estar bien informada sobre lactancia es importante. Bien en libros (Como los del citado Carlos González o Pilar Martínez), o bien pidiendo ayuda en Asociaciones como Alba Lactancia Materna (aquí su Facebook) o grupos como Asesoras de Lactancia on line (su Facebook).
-Tapones para los oídos: Para evitar comentarios innecesarios del exterior y que corren el riesgo de poner en peligro vuestra lactancia, perturbando vuestra paz y tranquilidad.
-Contacto visual: Mira a tu hijo cuando le des de mamar, el resto del mundo, puede esperar. Y si las tomas son largas, puedes a provechar para leer un libro, como Un regalo para toda la vida, de Carlos González o Amar con los brazos abiertos, de Carmina Baeza.
-Muchas paciencia, en dosis infinitas: Habrá días y momentos complicados, pero cuando tu bebé te mira y te sonríe o se duerme poco a poco haciendo succión no nutritiva en tu pecho y en tus brazos, no tiene precio.
Quería terminar con una frase que leí una vez y me parece preciosa y llena de significado para la lactancia: "No importa si han sido minutos, horas, días, semanas, meses, o años...Gracias por regalar a tu bebé leche materna"
¿Qué os parecen mis imprescindibles? ¿Creéis que me dejo alguno?
Yo no añadiría ninguno más! La verdad es que el más útil es el de los tapones para los oídos! jejejejeje.
ResponderEliminarBesos!
Pues sí, jaja, los tapones van pero que muy, muy bien. besitos y feliz lactancia!
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